JUAN S. SÁNCHEZ | Santa Cruz de Tenerife
Íñigo Jofre, Fredy Domínguez y Diego Torres, ayer en el club Las Arenas. | DA
Los tinerfeños Íñigo Jofre y Diego Torres demostraron el pasado fin de semana que no tiene límite para jugar ni para soñar. La pareja norteña, aún en edad infantil, se proclamó campeona del TyC 3 de Antequera, Málaga, un torneo en el que se sacaron una espina que traían clavada desde el anterior torneo celebrado en Madrid.
Y es que Íñigo y Diego se cobraron la venganza de la derrota sufrida por aquel entonces frente a los locales Iván Ramírez y Jairo Bautista. Con ese objetivo llegaron los dos tinerfeños a la cita de Málaga.
Perjudicados en anteriores ocasiones por tener que arrancar desde la fase previa y acumular mucho más desgaste que sus rivales, Íñigo y Diego se fueron deshaciendo de contrincantes hasta que se plantaron en los cuartos de final donde pasaron por encima de Neave y Ballesta a los que arrollaron por un contundente 6/1 y 6/0.
Luego, en la ronda de semifinales, Íñigo y Diego vencieron con comodidad a Muñoz y Musgo por 6/2 y 6/3 para citarse en la gran final frente a la pareja que tenían en mente. Y la revancha llegó pese a perder en el primer set frente a Ramírez y Bautista (6/3).
Los tinerfeños se repusieron en las dos siguientes mangas para desarbolar a sus contrincantes con un doble 6/1 con el que sellaban su brillante participación en el torneo andaluz. Su entrenador, Fredy Domínguez, con el que ya trabajaban ayer por la tarde, admitió su satisfacción por el logro y por cumplir su lema sobre la pista. “Trabajar, trabajar y trabajar”.