Alfonso se desmarca del acuerdo sobre los barrancos

DIARIO DE AVISOS | Güímar

El Pleno del Ayuntamiento de Güímar aprobó ayer dar su apoyo a la iniciativa legislativa del Cabildo para instar al Parlamento de Canarias a la elaboración de una ley que regule la restauración de la zona de los Barrancos de Güímar, un ámbito deteriorado por décadas de extracción arenera. La moción, que fue el único punto del día en este pleno extraordinario, recibió el apoyo de los dos grupos de la oposición (Seis concejales del PSOE y uno de Sí se puede) y el único voto en contra fue el del concejal de Alternativa por Güímar (AxG) y primer teniente de alcalde, Sixto Alfonso.

La Proposición de Ley del Cabildo de Ordenación de Los Barrancos y restauración de ese espacio establece la “declaración de interés autonómico para la restauración y ordenación de este ámbito, en orden al restablecimiento de sus valores ambientales y paisajísticos originales”, aunque deja abierta otras alternativas al suelo, “por interés general”, siempre que sean compatibles con los valores ambientales y paisajísticos a proteger y se garantice la seguridad de los cauces e infraestructuras hidráulicas, asumiendo el promotor los costes que de ello se derivara”.

La alcaldesa de Güímar, Carmen Luisa Castro, destaca que “hoy los güimareros estamos de enhorabuena, porque el trabajo de tantos años y de tantas corporaciones ve este apoyo. Hemos estado manteniendo reuniones con el Cabildo durante nueve meses y nos han dicho que este es el único procedimiento para terminar con las extracciones y que esta iniciativa no exime a los extractores de su responsabilidad para la restauración”.

El primer teniente de alcalde, Sixto Alfonso, votó en contra de la moción “por coherencia con nuestro programa, ya que no tenemos claro que los extractores con este texto no queden libres de toda responsabilidad”. Así, pidió más garantías de que los “dueños de esos terrenos son los que deben pagar ese daño, uno de los mayores impactos ambientales y ecológicos, y no todos los canarios. Queremos la rehabilitación, pero con una responsabilidad que tendría que venir aquí claramente definida, al igual que el concepto de interés general”, concluyó.