Las bajas temperaturas del verano reducen la vendimia este año

Algunas zonas de la isla comenzaron a recoger la cosecha desde finales de julio y se prolongará hasta septiembre. | DA

JESSICA MORENO | Santa Cruz de Tenerife

El atípico verano que se está viviendo, con unas temperaturas más bajas de lo habitual por estas fechas, y la consecuente aparición de algunas enfermedades han provocado un descenso en la producción de uva en la Isla, más acuciante aún en la zona norte. De hecho, se prevé que la vendimia, que ya ha comenzado en algunas comarcas, se pueda reducir en casi todas las zonas con respecto al año anterior, cuando se registró una buena cosecha tanto en cantidad, como en calidad.

Así, mientras algunas zonas como el Valle de Güímar o la comarca Tacoronte-Acentejo estiman un descenso considerable, otras zonas como puedan ser Abona e Ycoden-Daute-Isora prevé una cosecha más o menos similar a la de 2013, al menos con los datos manejados hasta el momento. Aún así, todos coinciden que las bajas temperaturas y la falta de sol en los últimos meses han sido clave par este retroceso.

Al respecto, el consejero de Agricultura, Ganadería y Pesca del Cabildo de Tenerife, José Joaquín Bethencourt, señaló a este medio que “en todas las comarcas se reducirá la cosecha, pero se prevé que la zona Norte sea la más afectada por esta primavera e inicio de verano tan extraño que hemos tenido, que al final ha favorecido la aparición de enfermedades”. Pese a que no se atrevió a dar una cifra concreta, el consejero matizó que pese a esta merma generalizada, “no será un año malo, pero tampoco tan bueno como el pasado”. De las cinco comarcas de la Isla, la de Tacoronte-Acentejo es la que anualmente recoge una mayor cantidad de uva. Por ello, destaca el hecho de que es una de las zonas más afectadas por las bajas temperaturas de las últimas semanas y se estima que la reducción esté en torno al 20% o el 25%. Desde el Consejo Regulador se insistió en que este año “ha faltado sol” y la viña ha necesitado más trabajo que otros años.

El Valle de Güímar es otra de las zonas afectadas, la cual estima recoger en torno a 350.000 kilos de uvas, lo que supone una caída del 30% con respecto a 2013, también motivado al “verano fresco y la alta se humedad”. Asimismo, aunque no se concretó una cifra, el Consejo Regulador del Valle de La Orotava confirmó también esta merma en su zona, en comparación a los datos del verano pasado.

Las enfermedades también han afectado a la zona de Ycoden-Daute Isora, puesto que sus uvas han apreciado en algunos núcleos la aparición de ceniza, aunque aseguran que está controlada. Asimismo, desde el Consejo Regulador se prevé se mantendrá la misma cantidad que el pasado año, con una cifra casi del millón de kilos vendimiados.

En el caso de la comarca de Abona, que aprecia una reducción con respecto a las previsiones que se tenían para este verano, calculan al menos mantener el dato de la pasada vendimia. “Si no hubiera sido por las enfermedades, este año, la cosecha hubiera sido mejor que la de 2013”, precisaron desde el Consejo Regulador.