El dique de San Andrés se adjudica la segunda semana de septiembre

En las dos próximas semanas quedará resuelto el proceso administrativo de adjudicación del dique. / DA

NATALIA TORRES | Santa Cruz de Tenerife

El proceso sigue con normalidad, al menos hasta que el Tribunal Central de Contratación se pronuncie sobre el recurso presentado por la Federación Canaria de Surf. Así, la Autoridad Portuaria estima que en la segunda semana de septiembre se procederá a la adjudicación definitiva de la obra del dique semisumergido de San Andrés, tramitada por la vía de urgencia. Según detallan desde el puerto tinerfeño, una vez que ya se conocen las ofertas presentadas por una decena de empresas, esta misma semana se reúne la Comisión de Evaluación Técnica para estudiar las propuestas de cada una de las sociedades que aspiran a la construcción del dique. Una vez se produzca esta reunión, la próxima semana se procederá a la convocatoria de la mesa de contratación para analizar en este caso las ofertas económicas.

La obra cuenta con casi cuatro millones de euros de presupuesto de los que la Autoridad Portuaria tiene comprometidos dos y el resto los pondrá el Ministerio de Fomento. Aquellas oferta que resulte viable técnicamente y mejore las condiciones económicas será la que finalmente sea elegida para la construcción de la infraestructura de protección del frente marítimo de San Andrés.

Este cronograma se cumplirá siempre y cuando la decisión que tome el Tribunal de Contratación no le de la razón a la Federación Canaria de Surf que ha pedido dos cosas: que no se admita a trámite la licitación del dique por la vía de urgencia, puesto que consideran que no se ajusta a lo que marca la norma; y que, mientras el Tribunal decide, se aplique unas medidas preventivas para que se paralice el proceso de adjudicación iniciado por la Autoridad Portuaria de Santa Cruz de Tenerife. Hasta entonces, que el puerto tinerfeño estima que sea ya en septiembre cuando haya pronunciamiento del Tribunal, se seguirá con la licitación de una obra que se espera desde hace mucho tiempo por los vecinos que, hoy mismo, pueden verse de nuevo afectados por el fuerte oleaje.