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Juan Acosta: “La mayoría absoluta nos hizo apartarnos de los vecinos y sus necesidades”

   
JUAN ACOSTA AISU SANTA URSULA

Juan Acosta, portavoz de AISU en el Ayuntamiento de Santa úrsula. / FRAN PALLERO

GABRIELA GULESSERIAN | Santa Úrsula

No se atreve a hacer un diagnóstico de los resultados de las próximas elecciones, pero espera que sea su agrupación la que obtenga la confianza de los vecinos para poder gobernar. En 2011 AISU no consiguió la mayoría suficiente en el Ayuntamiento dejando paso, después de diez mandatos consecutivos, a un gobierno de pacto entre el Partido Popular y el único edil socialista. Está convencido que ello es posible y para eso trabaja, compatibilizando su militancia con su profesión de médico, en la que lleva más de 37 años, la mayoría de ellos en el barrio La Corujera.

-¿Cuáles han sido los principales errores de su formación politica?

“Ha habido muchos y lo importante es reconocerlos. Quizás el principal haya sido el hecho de tener una mayoría absoluta, que nos hizo separarnos del contacto directo con el pueblo y sus necesidades reales y esa confianza hay que recuperarla”.

-¿Cómo convence a los vecinos que AISU no es lo mismo que CC?

“Porque somos una agrupación independiente, con nuestros estatutos, que apoya a otro en programas determinados. En AISU hay personas de diferentes ideologías, con un único objetivo, Santa Úrsula”.

- ¿Qué radiografía hace del Ayuntamiento actual?

“Hay una falta de calidad democrática absoluta generada por un grupo de gobierno minoritario con incapacidad para llegar a un diálogo y a un consenso en todos los asuntos, desde las obras RAM hasta la aprobación del presupuesto. Pero además, se ha perdido la calidad democrática porque la alcaldesa, Milagros Pérez, ha abandonado las formas políticas y paraliza la información que le permite a la oposición fiscalizar la labor del gobierno. Ni siquiera responde a las preguntas que se le formulan en el pleno o lo hace con monosílabos. Y lo último, es que los afiliados de uno y otro partido del grupo de gobierno pululan por las dependencias municipales incluso dando órdenes al personal y eso no se puede permitir. Y todo ello se percibe en la calle porque se traduce en una parálisis absoluta para concretar propuestas.

- ¿Cuál es el principal problema del municipio en la actualidad?

“El desempleo es muy grave ya que Santa Úrsula tiene 2.093 parados. Por eso llama la atención que cada año solo se le dedique 105.000 euros al plan de empleo social, cuando otras localidades como Santiago del Teide o La Matanza, con menor número de habitantes y también de desempleados, destinan 269.000 y 300.000 respectivamente. Hay otras actuaciones importantes que necesitan los vecinos y que son urgentes, como el mantenimiento de los comedores escolares durante el verano, o el servicio de transporte, sobre todo en la parte alta. Las obras RAM en los colegios tampoco se han llevado a cabo por segundo año consecutivo. Son cosas que un gobierno no se puede permitir”.

- ¿Qué errores le achaca al Ejecutivo de PP-PSOE?

“Que no tiene unas prioridades marcadas. Lo único que le importa a los socios de gobierno es llegar a final del mandato. En servicios sociales, por ejemplo, no solo no se ha hecho absolutamente nada nuevo sino que se ha desechado el plan estratégico sociosanitario que daba la idea de dónde había que actuar y cuáles eran las pautas a seguir. También ha rechazado un plan de drogodependencias; se permite perder una subvención del Gobierno de Canarias; y la atención domiciliaria ha bajado a 5 ó 6 trabajadoras para todo el municipio con la carga que ello significa y pese a que ha aumentado el número de usuarios”.

- ¿Esta situación se ha dado durante los tres años de mandato o se agravó cuando los ediles rebeldes del PP dejaron el Gobierno por discrepancias con Milagros Pérez?

“Al principio las directrices fueron comunes, pero desde que los rebeldes renunciaron, PP-PSOE ha perdido más el tiempo en cuestiones de tipo interno que en solucionar los problemas de los vecinos. Aunque ellos insisten en que AISU es el causante de todos los males en el municipio”.

- ¿Se puede gobernar un Ayuntamiento con tres personas?

“Es prácticamente imposible. Aquí no hay supermanes, se necesita gente trabajadora, los técnicos están para hacer la labor técnica y los concejales para tomar decisiones y ahora tenemos una parálisis absoluta”.

- ¿Cuál es la relación del gobierno con la oposición?

“Totalmente negativa. No hay ningún tipo de diálogo ni consenso. No se puede permitir, como ocurrió con el PGO, que la alcaldesa nos llame 48 horas antes para celebrar una reunión informativa con el redactor del plan y cuando le pedimos tener las reuniones precisas para analizarlo, igual que las alegaciones presenadass, no nos convoque a ninguna”.

- La alcaldesa le achaca a AISU rechazar un documento que impulsó en su momento.

“No es cierto, tiene variaciones, como determinadas zonas que han cambiado el uso y por eso se presentaron alegaciones”.

-¿Si en las próximas elecciones fuese necesario un pacto para alcanzar la Alcaldía, a quien elegiría como socio de gobierno, al PP o al PSOE?

“Hay que esperar el momento y tener los programas electorales delante. Pactar por pactar no conduce a nada. Un pacto previo es insultar de manera fraudulenta el voto de los vecinos. Dependiendo de como sean los pactos y con programas electorales por delante, se verá”.

-¿Será el candidato en 2015?

“Ahora mismo eso no me preocupa, pero sí tener un proyecto ilusionante, que recale en la población y para eso trabajamos. Llegado el momento serán los órganos del partido quienes con la mayor transparencia elijan al candidato”.

-¿Las urbanizaciones privadas como La Quinta y San Clemente son las grandes olvidadas?

“Las dos tienen sus circunstancias particulares y por lo tanto, problemas diferentes. En cualquier caso, en ambas, y en otras más, los vecinos no tienen la culpa de la situación y hasta que se resuelvan las cuestiones legales hay que brindarles una serie de servicios que además, pagan. Hay que buscar una solución como sea, no se puede esperar más tiempo. Nosotros no estuvimos con las manos quietas, pero nuestro esfuerzo no llegó a buen puerto y por lo tanto, hay que buscar fórmulas legales nuevas”.

- ¿Cómo se identifica más, como médico o como político?

“Como médico en primer lugar. La política es una cosa que ha venido a posteriori, que me gusta pero no vivo de ella. Tiene muchos sinsabores y también una carga social muy importante que pude ver gracias a las áreas que asumí cuando AISU estuvo en el gobierno”.