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Manuel Fajardo: “Es un dislate que el ministro que presiona al Supremo hable de chantajes”

   
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Manuel Fajardo. / DA

DOMINGO NEGRÍN MORENO | Santa Cruz de Tenerife

El curso político se inaugura con muchas tareas pendientes y la pizarra emborronada. En los pupitres del Parlamento canario están las hojas de actividades. Manuel Fajardo saca punta.

-No ha sido este un verano excesivamente caluroso. Sin embargo, se avecina un otoño caliente…

“Es cierto que lo que queda de legislatura será bastante prolijo en cuanto al trabajo que habrá que realizar. Además, a la actividad parlamentaria se unen los procesos de designación de las candidaturas dentro de los partidos. Si a esto le añadimos lo de las prospecciones petrolíferas, efectivamente nos aguarda un otoño caliente. Hay asuntos de vital importancia para Canarias que tendrán que resolverse en este periodo. Pero también hay que decir que eso va en nuestro sueldo. No me quejo”.

-El petróleo es carburante para la maquinaria política…

“Si en Canarias se habla de petróleo es porque José Manuel Soria y Mariano Rajoy así lo han querido, ni más ni menos. La consulta, que no referéndum, tiene nombres y apellidos”.

-¿Por qué?

“Por su actitud de total intransigencia. El petróleo se impone en Canarias y, en cambio, en el resto de España se intenta consensuar con las instituciones y con las organizaciones ciudadanas. Al PP le corresponde aclararlo. Y Soria debería explicar por qué se mueve por la política como un perdonavidas soberbio y prepotente. Quien tendrá que precisar por qué ante el más mínimo riesgo de daño medioambiental no hay prospecciones en Baleares y en, Canarias, a sabiendas de que hay riesgo porque así lo constatan los estudios, sí las va a haber será Mariano Rajoy en las Cortes. Yo espero que el PSOE lo haga comparecer”.

-¿Si el Partido Popular estuviera gobernando en Canarias las cosas serían distintas?

“Bueno, Soria dijo cuando se marchó para ser ministro que iba a incendiar Canarias. Ha quedado retratado ante la opinión pública. Yo entiendo que no actuaría de la misma manera. El problema de Soria es que no ha sabido digerir que él no sea presidente del Gobierno de la Comunidad Autónoma. Y a mí me llama poderosamente la atención que ahora pretendan reformar la ley electoral para que el alcalde salga de la lista más votada. Convendría recordar aquella famosa teoría de Soria cuando nosotros logramos 26 diputados [con Juan Fernando López Aguilar], que empezó a sumar el número de votos y de parlamentarios de Coalición y del PP para justificar un pacto entre las fuerzas que no habían ganado las elecciones. Pues, bueno, resulta que se le llena la boca con eso del pacto de perdedores. Con respecto a sus islas, se está comportando de una forma totalmente revanchista, guiado solamente por el odio visceral hacia quienes no han aceptado aliarse con él. Si José Miguel Pérez hubiese querido ser presidente lo habría sido, porque el PP se lo ha ofrecido en más de una ocasión. Pero nosotros no seremos cómplices de sus políticas de ajustes económicos y retroceso social”.

-¿Con presión es posible la comprensión?

“El PP denuncia chantajes y presiones y yo me quedo asombrado. ¡Mira quién habla! Un ministro que ha presionado al Tribunal Supremo y al Ministerio de Medio Ambiente. No deja de ser un dislate que está dentro del argumentario que siguen a rajatabla: riqueza, empleo, impuestos y Marruecos. De ahí no se salen. En eso son aplicados. Le reconozco el mérito. Son disciplinados. Se abren procesos para la elección de candidatos y Soria los nombra por un concurso de méritos entre los más pelotas de los últimos cuatro años. Eso se llama concurso de pelotas”.

-De todas esas iniciativas parlamentarias en trámite, ¿cuáles son las más determinantes?

“Todas las iniciativas que actualmente están en el Parlamento son importantes, en mayor o en menor medida. Creo que es conveniente delimitar las atribuciones competenciales. La ley de cabildos es buena para Canarias, la de municipios también, y la de transparencia. La reforma del Estatuto de Autonomía hay que abordarla; la ley de identidad de género, igual; la de participación institucional de las organizaciones sindicales y empresariales, lo mismo; la de armonización y sostenibilidad, otro tanto; así como la evaluación de la ley de renovación turística y la de RTVC”.

-La reforma del Estatuto no va a prosperar en esta legislatura…

“Que no salga adelante en esta legislatura no significa que renunciemos a seguir trabajando en ello. De hecho, se están dando circunstancias que todavía nos compelen más a hacerlo. El PP prometió a los canarios que iba a resolver muchísimas cuestiones relacionadas con las competencias, como en costas. Hay que alentar el debate. A mí me gustaría que el Partido Popular nos detallara en diciembre cuál es la reforma electoral que quiere, que diga públicamente de dónde recorta diez escaños (de 60 a 50)”.

-¿En qué situación quedaría el Gobierno regional si tanto CC como el PSOE no renuevan la confianza en Paulino Rivero y José Miguel Pérez, respectivamente?

“Hombre, si concurren a unas elecciones internas y las pierden no quedarían bien. Negar tal evidencia sería engañarnos y poner paños calientes. Obviamente, no sería una situación buena a nivel personal para ninguno de los dos. Eso no quita que continúen ejerciendo su labor con ahínco”.