La ruina también es municipal

Algunos de los edificios presentan serios desperfectos. / ANDRÉS GUTIÉRREZ

NATALIA TORRES | Santa Cruz de Tenerife

“Que existe desde hace mucho tiempo”. Esa es la primera acepción de las siete que recoge el Diccionario de la Real Academia Española (DRAE) de la palabra antiguo, definiciones en las que no se asocia esta palabra con otras como deterioro, daño, desperfecto o ruina, vocablos que por otra parte sí que se relacionan con una parte tan importante de la capital como es el Antiguo Santa Cruz o lo que es lo mismo, el casco histórico. Un paseo por sus calles hace pensar que otra ciudad es posible cuando se observa inmuebles más deteriorados junto a otros que, por el contrario, han aguantado bien el paso del tiempo gracias, principalmente a que sus propietarios así lo han defendido. En esa mezcla de privado y público que es el Antiguo Santa Cruz, existen numerosos inmuebles que pertenecen al Ayuntamiento capitalino, fruto de una serie de expropiaciones que se hicieron en su día para obras previstas de saneamiento de la propia trama urbana, y que luego han quedado ahí sin uso, también otras situaciones anormales, no bien procedimentadas que han dejado en un limbo administrativo algunas de esas casas.

El entorno de La Noria es el que más inmuebles acumula, concretamente en la calle de Antonio Domínguez Alfonso, casi una decena de números, distribuidos en tres inmuebles, pertenecen al Consistorio, entre ellos algunos tan significativos como la Casa del Miedo. Por sus fachadas se nota el paso del tiempo y el deterioro, ese mismo que se achaca a la dejadez de los particulares que no pintar o retocan sus propiedades en la zona. La mayoría de estos números están ocupados por los grupos del Carnaval que son los que, en buena medida, se hacen cargo de su mantenimiento, sobre todo en su acondicionamiento interior.

Hay otras calles como la del Doctor Allart, recientemente cerrada por el riesgo de desprendimiento de un edificio en mal estado y a cuyo propietario el Consistorio no logra localizar, en la que, justo en frente del citado inmueble, existe otro, éste de propiedad municipal, cuyas condiciones no son mucho mejores. Un cierre que por otra parte no se sabe cuánto durará, aunque como reconocen los vecinos, muchos turistas y transeúntes hacen caso omiso a las indicaciones y se saltan la valla pasando por la citada vía. Si se acude a la calle de El Clavel, en el número 21, otro edificio de propiedad municipal se alza en la esquina donde también otro grupo del Carnaval tiene su sede.

Solo en esta zona se puede localizar hasta una decena de inmuebles municipales cuyas condiciones de conservación dejan, en algunos casos, como el de Doctor Allart, mucho que desear en cuanto a protección.

El Ayuntamiento anunciaba hace unas semanas que algo más de 15 inmuebles en el Antiguo Santa Cruz en “mal estado”, aunque no se dijo si alguno es de propiedad municipal. Entonces se anunció que se procedería a las ejecuciones subsidiarias para arreglarlos porque “no se puede permitir que Santa Cruz siga pagando la mala cabeza de muchos propietarios que ven como se edificio se deteriora y no hacen nada”. Es de esperar que el Ayuntamiento de Santa Cruz aplique el mismo criterio para los inmuebles de su propiedad.