YAZMINA ROZAS | Santa Cruz de Tenerife
En los casi tres años de andadura que lleva la asociación Soho Santa Cruz Zona Comercial Abierta, este grupo de comerciantes ha logrado convertir a este área de la capital tinerfeña, que engloba las calles Viera y Clavijo, Pérez Galdós, Callao de Lima, Sabino Berthelot, Jesús Nazareno, Pi y Margall, Robayna, San Clemente, San Lucas, Callejón del Combate y Suárez Guerra, en uno de los puntos con más color y personalidad de toda la ciudad.
“Cuando creamos la asociación queríamos revitalizar la zona y darle su personalidad con actividades diferentes y con mucho color”, explica la presidenta de la asociación, Begoña Alcántara. “Queremos decorar la zona y que quede acogedora, que cuando la gente venga siempre haya cosas que mirar y fidelizar al cliente. Por eso cuidamos mucho el aspecto de la calle y de los locales para dar alegría”, apunta Ana Cubillo, miembro de la asociación y propietaria de uno de los comercios del lugar.
El lugar está atrayendo a negocios de otros puntos y hay varias aperturas próximas
La última, bajo el nombre Los Brotes Verdes llegan a Soho Santa Cruz, llenó las calles de flores y plantas que los locales pusieron en sus entradas. La asociación tiene la mente puesta ya en la campaña de Navidad y está barajando realizar también alguna iniciativa con motivo de Halloween.
“Las actividades en nuestra zona las organiza la asociación, pero es verdad que Distrito Centros nos apoya muchísimo y que el Ayuntamiento ha dado muchas facilidades a la hora de dar los permisos para hacer las actividades en la calle, en eso sí hemos notado mejoría en estos tres años”, indica Alcántara.
Tres años que han sido “muy difíciles” y en los que la asociación ha perdido a la mitad de sus miembros por culpa de la crisis, aunque por fin parece que comienza a cambiar la suerte y a atraer incluso nuevos negocios de otros puntos de la ciudad “porque esta zona se está poniendo muy bonita, los empresarios nos estamos moviendo para hacer cosas diferentes y es una zona más familiar. Y cuando las empresas empiezan a funcionar, eso llama a las demás”, señala Cubillo, quien apunta que hay varias aperturas próximas.
“Después de tres años tenemos la línea de trabajo muy clara: fomentar el comercio cercano, el trato agradable al cliente, la variedad y el servicio”, enfatiza Alcántara.
Aún así, ambas empresarias reconocen que “las ventas siguen mal” pero también que se empieza a notar a la gente “con otro humor”, así como “movimiento en la zona”, a pesar de los locales que puedan verse cerrados por los precios desorbitantes que ponen algunos de sus propietarios. “Esos locales no se van a alquilar y solo afean la zona, pero los propietarios prefieren tenerlos cerrados que alquilarlos por un precio razonable”, explicó Ana Cubillo.
Los árboles vestidos de croché son uno de los principales focos de atracción
Una opinión que comparte plenamente Begoña Alcántara, quien añade que “la tarta que nos interesa es el turista que viene una semana al Sur o el Norte”, así como el residencial que pasa aquí el verano o el invierno. Por ello, abogan por “potenciar de verdad el patrimonio de Santa Cruz” y convertirla en una ciudad que anime al turista a visitarla, facilitándoles además el transporte a la ciudad con más información en Internet sobre los accesos o parkings, así como abarantando el coste de las guaguas que vienen del sur.
Potenciar los sábados
Asimismo, para los empresarios de la asociación una acción que consideran que sería muy beneficiosa para el comercio de toda la ciudad sería potenciar los sábados, en vez de los domingos. “Nosotros reclamamos al Ayuntamiento que haga otras acciones, no puede ser que toda la fuerza de promoción del comercio de Santa Cruz se dedique solo a los primeros domingos de mes. Es imposible dinamizar una zona tan amplia como se pretende y eso no funciona”, explica la presidenta de la asociación.
Ana Cubillo está de acuerdo en que abrir un domingo “no es rentable” y apuesta, en cambio, por potenciar los domingos desde un punto de vista cultural y dejar las actividades de dinamización comercial para otros días. “Si potencias el sábado -explica- harás que la gente abra más tiempo por la tarde y que, cuando empiecen a cerrar sobre las 18.00 o 19.00 de la tarde, la gente se quede en los restaurantes de la zona porque no tienen que trabajar al día siguiente. Con esto se potenciaría más la restauración y el comercio, porque puedo ampliar mi caja sin tener que ampliar mucho más gastos, como supone abrir un domingo”.
La asociación seguirá trabajando en la línea que se ha marcado en estos tres años porque “la gente tiene ganas de que hagamos cosas”.
La restauración ha resurgido con potencia en esta zona convirtiéndose en uno de sus puntos fuertes con una oferta variada, diferenciada y de calidad en un entorno tranquilo y agradable. Una noche de fin de semana es complicado encontrar mesa en cualquiera de los locales. La plaza Ireneo González ofrece un ambiente familiar, aprovechando el espacio peatonal de la propia plaza. El Callejón del Combate vuelve con fuerza con nuevas incorporaciones y una ruta de la tapa que el pasado julio fue todo un éxito. A estas zonas se suman otras muchas calles con locales muy recomendables, como la de Jesús Nazareno, Pi y Margall o Viera y Clavijo, entre otras.