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Más de 43.000 familias canarias, pendientes de la prestación de 426 euros

   

DOMINGO NEGRÍN MORENO | Santa Cruz de Tenerife

Decenas de miles de parientes pobres de la crisis, las 43.786 familias residentes en Canarias sin ningún tipo de ingresos (el 5% del total) están pendientes de la prestación de 426 euros que el Gobierno de la nación ha pactado con los agentes económicos y sociales para desempleados de larga duración (entre 400.000 y 450.000 en el conjunto de España). Con una periodicidad inicialmente prevista de seis meses, el despliegue del programa de inserción conlleva un desembolso de más de 1.000 millones de euros procedentes de las arcas del Estado.

Gloria Gutiérrez, directora general de Trabajo

Gloria Gutiérrez, directora general de Trabajo de la Consejería de Empleo, Industria y Comercio. / DA

Aunque no es para tirar voladores, porque la euforia podría explotar en las manos, esta medida paliativa anima la amarga esperanza de la población activa que quiere trabajar y no encuentra una oportunidad. En una región especialmente castigada por el azote el paro, la noticia no es como para publicarse en la sección de breves de los periódicos. Más bien, lo contrario. El martes, en el Parlamento, la diputada del PSOE Gloria Gutiérrez le sacó lo colores al PP. “En septiembre rechazó una proposición en la que se reclamaba exactamente lo mismo”, arguyó la exdirectora general de Trabajo. Desde esa perspectiva, Gutiérrez interpreta que Mariano Rajoy “ha desautorizado al Partido Popular”. Según ella, “se resiste a que las personas que carecen de trabajo como consecuencia, entre otros factores, de las políticas neoliberales aplicadas por la derecha, principalmente en la reforma laboral y en los recortes, dispongan de los mínimos recursos para alimentarse”. Gloria Gutiérrez cree que a la ministra Fátima Báñez “no le ha quedado otro remedio que doblegarse al clamor social”. Preguntada ayer en los pasillos de la Cámara legislativa por los efectos de la iniciativa firmada el lunes en el palacio La Moncloa, su señoría insistió en la idea fuerza de que “la subvención no es la solución, sino un mal menor”.

Mientras la consejera Paquita Luengo asevera que la pócima llega tarde y que es insuficiente para curar la enfermedad, la oposición le da a probar de su propia medicina. Tanto el PP como NC afilan el bisturí de las intervenciones quirúrgicas y salpican la bata de “matasanos” con sangre del sufrimiento en la “interminable lista de espera”.