JUAN J. GUTIÉRREZ | Segovia
SEAT apuesta por los nuevos combustibles. Buena prueba de ello es la llegada de dos modelos impulsados por gas natural comprimido (GNC), el SEAT León TGI y el SEAT Mii Ecofuel. Ambos combinan la utilización de GNC con gasolina, consiguiendo unas cifras de autonomÃa difÃcilmente igualables. El León 1.4 de 110 CV tiene una autonomÃa de 1.360 km y emisiones de 94 g/km, mientras que el Mii Ecofuel 1.0 68 CV emite tan solo 79 g/km de CO2 y alcanza una autonomÃa de 600 km). Además, también se benefician de unos niveles de emisiones muy bajos y unos costes por kilómetro reducidos.
El gas natural comprimido es el combustible más respetuoso con el medio ambiente y la única alternativa real a los derivados del petróleo. Los motores GNC están basados en motores de gasolina y disponen de dos depósitos, uno para el gas natural ubicado debajo del piso del maletero y otro para la gasolina. El motor siempre utilizará el depósito de gas natural y cuando ya esté vacÃo utilizará el de gasolina.
Hay que destacar que el nivel de energÃa eficiente contenida en un kilo de gas natural es superior a cualquier otro combustible, es decir, que necesita menor cantidad para producir la misma energÃa. La energÃa contenida en un kilo de gas natural corresponde a 2 litros de GLP, 1,5 litros de gasolina y 1,3 litros de diésel. Además, no depende de las reservas de petróleo, por lo que su precio no está sujeto a sus fluctuaciones y subidas inesperadas.
La principal ventaja del GNC frente a otros combustibles está en la reducción de las emisiones de CO2 y los óxidos de nitrógeno NOx (especialmente comparado con los diésel). Los modelos de gas natural comprimido reducen en torno a un 25% las emisiones de CO2 y un 87% las de NOx.
SEAT ya comercializa los modelos propulsados con gas natural comprimido en Alemania, Suecia, Austria, Suiza, PaÃses Bajos o España. Italia es su principal mercado: el 66% de las ventas del SEAT Mii corresponde al modelo Ecofuel y el 42% del León al TGI.
Sus dos depósitos de gas natural y gasolina permiten una autonomÃa récord. / DA
Máxima seguridad y economÃa
En su estado natural, el gas natural es inodoro. Como medida de seguridad para detectar posibles pérdidas o escapes, es perfumado para permitir una fácil detección incluso con una concentración del 0,3% en el aire (para que se produzca la combustión es necesario entre un 5% y un 15% de concentración en el aire). La temperatura de ignición del gas natural es muy alta, cercana a los 600 grados, comparada, por ejemplo, con los 315 de la gasolina. El gas natural (al contrario que otros combustibles como el gasóleo, la gasolina o el GLP) es más ligero que el aire, esto significa que en el caso de una pérdida o escape, serÃa rápidamente disipado en la atmósfera. De este modo se elimina el riesgo de la acumulación. El GNC está almacenado a alta presión (aproximadamente 200 bar). Y todo el sistema de combustible trabaja a alta presión.El depósito y todos los conductos están construidos y preparados para soportar dicha presión. Como complemento a la robusta construcción de los depósitos, todos los vehÃculos equipados con GNC disponen de válvulas de seguridad. En una situación de excesivo calor, la válvula se abre, dejando salir el gas a la atmósfera. Los vehÃculos equipados con tecnologÃa GNC están sujetos a los mismos requisitos de seguridad crash test que el resto de vehÃculos. Y obtienen los mismos resultados.