X
SANIDAD >

Canarias oferta menos plazas MIR de las que tiene acreditadas

   

SMEXAMEN MIR 02.jpg

JOSÉ LUIS CÁMARA | Santa Cruz de Tenerife

Ser médico en España ya no asegura un puesto de trabajo fijo y unas condiciones acordes a la responsabilidad que conlleva. Cada vez son menos las plazas para residentes que se ofertan cada año, a pesar de que ha aumentado el cupo en la carrera de Medicina y se han creado más de media docena de facultades públicas y privadas. Lejos de mejorar, la situación tiende a empeorar en los próximos años si las administraciones competentes no dan el golpe de timón que llevan tiempo demandando los profesionales y sindicatos con representación en el sector. En Canarias, según confirman los datos oficiales de las últimas cuatro convocatorias para médicos internos residentes (MIR), desde 2011 la Consejería de Sanidad no oferta todas las plazas que tiene acreditadas tanto para médicos de familia como para las unidades docentes de los hospitales.

En concreto, según un estudio elaborado por el Sindicato Médico (CESM) en la provincia de Santa Cruz de Tenerife, con datos extraídos de las convocatorias publicadas en el Boletín Oficial del Estado (BOE), en la reciente convocatoria de 2014, cuyos exámenes se celebraron en enero, de las 283 plazas acreditadas en las unidades docentes multiprofesionales de Atención Familiar y Comunitaria y de Atención Especializada se ofertaron 252. Este desfase, que según el CESM se debe fundamentalmente a “criterios economicistas”, es el mayor de los últimos cinco años, y se deja notar sobre todo en hospitales como el Doctor Negrín de Las Palmas, donde se ofertan 42 de las 51 acreditadas; el Insular, donde solo se han sacado 39 de las 47 existentes; La Candelaria, que tiene 48 acreditadas pero pone en liza 42; y el HUC, donde se ofertaron para el último MIR 42 de las 47 especialidades que tiene certificadas. “El Servicio Canario de la Salud es el que decide ahorrarse esas plazas de formación de profesionales”, destaca el secretario general del Sindicato Médico en Tenerife, Levy Cabrera, que acusa además al Ministerio de “falta de previsión”. No en vano, el dirigente sindical recuerda que “tras haber tomado la decisión de aumentar las plazas de médicos especialistas se apostó, de forma equivocada, por incrementar descaradamente el número de alumnos en las facultades. Fue un disparate y se formaron licenciados que no podían acceder a una plaza para completar su formación”, añade Cabrera.

Además, la situación se vio recrudecida porque la necesidad de profesionales llevó a su vez a muchas comunidades a recurrir a médicos extranjeros, hasta el punto de que entre 2001 y 2011 se convalidaron más títulos de foráneos que españoles se licenciaron en la carrera. En concreto, según el CESM, esos diez años se acreditaron 50.205 títulos extracomunitarios y acabaron la titulación en las facultades de Medicina del país 46.194. Esa misma falta de previsión, recuerda Levy Cabrera, ya provocó que en la convocatoria de 2013 Canarias se quedara por primera vez en toda su historia sin cubrir toda la oferta de plazas para residentes. En concreto, cuatro puestos de médico de familia se quedaron sin ocupar tras el reparto, una situación que según Cabrera “también fue el resultado de una medida economicista más del Gobierno central”. “En toda España quedaron libres 225 puestos, lo que pudo suponer un ahorro a las arcas estatales de cerca de 30 millones de euros”, denota el secretario general del CESM en Tenerife.

Más aspirantes

Si tomamos los datos de los últimos cinco años, para 2015 se han ofertado en todo el Estado 842 plazas menos de las que se ofrecieron en 2010, y 47 menos de las que hubo el año pasado, a pesar de que se presentaron medio millar más de aspirantes. La exigencia es, por tanto, cada vez mayor, y los recién graduados se afanarán por hacerse con un buen número. El MIR está considerado una de las oposiciones más duras que existen -si no la que más-, porque a diferencia del resto empieza en las facultades con una importante criba en la Selectividad, ya que es una de las carreras con la nota de corte más alta. La especialidad que cada aspirante elige depende del resultado que obtiene. El mejor será el primero en elegir y así sucesivamente. Las más demandadas los últimos años fueron Cirugía Plástica, Dermatología y Cardiología, y las quinielas para este curso no se alejarán demasiado de esta tendencia.

El nuevo papel del Ministerio

- El último MIR presentaba una serie de novedades respecto a convocatorias anteriores. La más relevante se refiere al nuevo papel que se ha otorgado el Ministerio de Sanidad para ser quien ajuste finalmente a las necesidades del sistema la oferta de plazas que establecen las comunidades autónomas. En cuanto a los exámenes, se mantiene como el año pasado la nota de corte del 35% de la media aritmética de las 10 mejores puntuaciones. También continuará sin cambios el cupo de plazas (7%) que se han reservado para los aspirantes con alguna discapacidad igual o superior al 33%. Este año, el número de personas que entran en este cupo ha aumentado un 2% con respecto a la convocatoria pasada.Por otra parte, el cupo de plazas que pueden ocupar los médicos extracomunitarios que vienen a realizar el examen se ha fijado en el 4% del total de la oferta. Para farmacéuticos y enfermeros se mantiene en el 3 y el 2%, respectivamente.Ahora bien, este año no habrá una segunda vuelta a la que podrían optar los médicos extracomunitarios que se quedaron fuera de la elección en el primer turno. Cada año, el Ministerio de Sanidad se basa en los estudios previos para establecer medidas que corrijan y mejoren las convocatorias. En los últimos años, se han incluido imágenes y casos clínicos para introducir la parte práctica que demandada la Ley de Ordenación de Profesiones Sanitarias (LOPS).

El examen de este año, bajo sospecha

El Ministerio de Sanidad ha decidido retrasar hasta mañana la lista de los resultados provisionales de los 28.830 exámenes MIR celebrados a finales de enero. Inicialmente, esos datos deberían haberse conocido hace aproximadamente 15 días, pero la decisión del departamento que dirige Alfonso Alonso de revisar uno a uno los exámenes, tras los fallos detectados y denunciados por algunos de los candidatos -se presentaron casi 600 quejas-, ha obligado a retrasar las notas. Los errores fueron descubiertos por un grupo de futuros médicos que comprobó que las respuestas del examen que les enviaba el Ministerio no se correspondían con las que figuraban en la prueba.

En el examen MIR se hacen tres copias de la hoja de respuesta de cada aspirante. Una de ellas va directamente al Ministerio; la segunda, de la que también es responsable el Ministerio, se envía a la empresa adjudicataria que Sanidad contrata para pasar esas respuestas a un formato informático; y la tercera se la queda el aspirante. El Ministerio suele adelantar, con anterioridad a los resultados provisionales, las plantillas de respuestas, y fue en este proceso en el que algunos de los aspirantes comprobaron que había errores respecto a la copia que ellos guardaban.

La decisión ministerial de revisar todas las plantillas de respuesta de las 28.830 personas que se presentaron probablemente ha impedido que pudiera llegar a tiempo para cumplir los plazos. Y si los hubiera cumplido, tal vez habría habido más errores de transcripción de los habituales. Finalmente, los resultados se conocerán mañana, las listas definitivas el 24 de marzo, la asignación de plazas será el 9 de abril y el plazo de incorporación entre el 20 y 21 de mayo.