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Los exconcejales de CC tienen que abandonar sus áreas de gobierno

   

Méndez le gana otra batalla a Niño y Sosa, pero la guerra no ha terminado. / DA

Méndez le gana otra batalla a Niño y Sosa, pero la guerra no ha terminado. / DA

NORBERTO CHIJEB | Arona

Los cinco concejales que abandonaron hace una semana Coalición Canaria (CC) no podrán seguir en el grupo de gobierno de Arona, a pesar del deseo del alcalde nacionalista Francisco Niño, tras ser expulsados ayer por la mañana por sus siete excompañeros de CC, lo que obligó a la secretaria municipal, Tania Rodríguez, a despojarles de sus competencias, atendiendo al Reglamento Orgánico de la Corporación, que recoge que no podrán tener competencias delegadas ni podrán ser tenientes de alcalde. Esta expulsión, tras integrarse el expediente como el último punto del orden del día, fue tomada en consideración por el Pleno, en el que no comparecieron -después de ser conscientes de la misma- los cinco concejales que han renegado del partido de Coalición Canaria. Miguel Ángel Méndez, edil y candidato de CC en las próximas elecciones, se mostró satisfecho por la decisión tomada y avanzó que el alcalde, que no firmó la expulsión de sus excompañeros, asumirá ahora las delegaciones de estos, aunque será el lunes cuando se reúna el grupo de gobierno, ahora con ocho concejales (alcalde incluido) para decidir el reparto de áreas, comisiones informativas y patronatos.

Méndez invitó a sus excompañeros Antonio Sosa, Manuel Reverón, Marta Melo, Ramón García y Eva Cabrera a mostrar “la coherencia de la que han hablado para mantener la gobernabilidad y aprobar los presupuestos”. El Gobierno municipal aronero se queda ahora en minoría frente a 17 concejales en la oposición.

Deciden los que permanecen

El artículo 72.1 del Reglamento Orgánico Municipal (ROM) de Arona señala que “los miembros de la Corporación que no se integren en el grupo político que constituya la formación electoral por la que fueron elegidos o que abandonen su grupo de procedencia tendrán la consideración de miembros no adscritos”. El artículo 72.2 señala que “cuando la mayoría de los concejales de un grupo político municipal abandonen la formación política que presentó la candidatura por la que concurrieron a las elecciones o sean expulsados de la misma, serán los concejales que permanezcan en la citada formación política los legítimos integrantes de dicho grupo político a todos los efectos”. Este ROM es diferente, por ejemplo, al de Arafo, en donde hoy gobiernan el alcalde y cinco concejales no adscritos tras abandonar el PP.