NATALIA TORRES | Santa Cruz de Tenerife
Reza un dicho popular que “no hay mal que cien años dure ni cuerpo que lo resista”, una máxima que en municipios como el de Santa Cruz puede que no se cumpla del todo, no porque haya males que duren más de cien años, que puede que los haya, sino porque la población que supera la centuria en la capital es la más numerosa de todo el Archipiélago. Un censo con 187 personas que tienen 100 años o más, según los datos ofrecidos por el portal Open Data del Ayuntamiento de Santa Cruz, colocan a la capital a la cabeza de todos los municipios canarios en este particular listado de centenarios. Y es que incluso la ciudad de Las Palmas de Gran Canaria, la única con la que por población podría compararse Santa Cruz y de la que la separan más de 100.000 habitantes, este censo centenario registra 178 personas con 100 años o más. Si se recurre al total de personas que nacieron a comienzos del siglo pasado en Canarias, según el Instituto de Estadísticas de Canarias (Istac), la suma es de 597, lo que supone que Santa Cruz represente el 22% de todos los centenarios de la ciudad. Los datos del portal municipal están actualizados a marzo de 2015. Si se hace un análisis por sexo, en esta ocasión sí que se cumple que las mujeres son más longevas que los hombres, puesto que son 127 las féminas centenarias frente a 60 varones.
Distritos
En cuanto a la distribución de esta población centenaria por los distintos barrios y distritos, se observa que es el de Centro-Ifara el que más acumula, con 69 vecinos distribuidos por las distintas urbanizaciones y barrios que componen el distrito y que superan los 100 años. Este distrito, junto con el de Anaga, es el que mayor tasa de envejecimiento presenta alcanzando el 20%, tres punto por encima del índice medio del municipio. Una población la de Centro-Ifara entre la que se encuentra la mujer más anciana de Canarias, Rosalba Castro San Luis, que el pasado mes de febrero cumplió 108 años en su actual residencia, el Hogar de Nuestra Señora de Candelaria, conocido como el Asilo de Ancianos de Santa Cruz, también centenario. Entre los barrios del distrito destacan El Toscal donde se localizan 13 de estos personas y Salamanca donde hay otras 10. En Anaga, las estadísticas municipales registran 16 personas que superan los cien años de forma que el mayor número se encuentra en San Andrés (5) y Valleseco (4).
El segundo distrito centenario es el de Salud-La Salle en el que se localizan 60 personas que superan el siglo de edad, 14 de ellas están en el barrio de Los Gladiolos y otra decena en La Salle.
El tercero es el de Ofra-Costa Sur en el que hay censados 31 vecinos centenarios. Destaca el barrio de García Escámez en el que se localizan hasta seis personas que tienen cien años o más.
Como era de esperar, porque es el distrito con la tasa de envejecimiento más baja, el Suroeste es el que menos población centenaria tiene registrada con una decena, la mayoría de ellas está localizada en el barrio de Tíncer.
Pero si estos son los vecinos de Santa Cruz que tienen cien años o más, los que se sitúan entre los 90 y los 99 años también alcanzan una cifra que ponen al municipio a la cabeza de los más longevos del Archipiélago en esta franja de edad. En total suman 1.703 personas comprendidas entre estas edades. Concretamente, 1.304 tienen entre 90 y 94 años y de ellos 948 son mujeres y 356 hombres. Entre los 95 y los 99 años hay censados otros 399 vecinos chicharreros, de ellos 117 son hombres y 282 mujeres.
Envejecimiento poblacional
Más allá del dato estadístico de que Santa Cruz encabeza el censo de centenarios, según el último análisis demográfico de la capital realizado por el Ayuntamiento, se constata que el 13% de la población que vive en la capital tiene entre 0 y 14 años, un porcentaje que en los pueblos del macizo ni siquiera llega al 1%. En el otro extremo, la población con más de 65 años, que en Santa Cruz representa el 17%, se sitúan Anaga y Centro-Ifara, ambos distritos con una tasa de envejecimiento superior al 20%. Ofra-Costa Sur y Salud-La Salle también superan la media del municipio con el 19% de su población por encima de los 65. Sólo el Distrito Suroeste, con apenas el 8% de población mayor, se muestra como espacio joven en la ciudad. En la última década ha pasado de 38.478 habitantes a 48.673 en la actualidad. Es la única área de la ciudad en la que la población ha crecido y donde hay más menores de 14 años que mayores de 65.
Esa tendencia hacia el envejecimiento poblacional se ve apoyada por otras ratios como la baja natalidad, baja mortalidad y pérdida de población joven, un proceso que no está siendo mitigado por la inmigración como ocurre en otros territorios. En cuanto a la edad media de maternidad (28 años), esta es menor que la media española y canaria, siendo en los distritos de Suroeste (26) y Ofra-Costa Sur (26) muy baja.
Estos datos vienen recogidos en el I Plan de Prevención y Desarrollo Comunitario elaborado por el Ayuntamiento para conocer el estado actual de la población e implementar medidas que redunden en la mejora de su bienestar e integración social.
Un modelo sin centros específicos de mayores
El municipio de Santa Cruz de Tenerife es de los pocos de los de mayor tamaño de la Isla que no cuenta entre su catálogo de servicios con un Centro de Día municipal o una residencia también de carácter municipal para la atención de los mayores. Desde Asuntos Sociales se apuesta por la concertación de este tipo de prestación con otras instituciones como el Cabildo de Tenerife. En cambio, el Ayuntamiento apuesta por reforzar la red de servicios que se ofrece a la población mayor a través del Plan Municipal de Mayores. Además de ofrecer el servicio de ayuda a domicilio y el de teleasistencia, a través de distintos programas puestos en marcha por el Plan de Mayores, se pretende realizar una labor de prevención para que los ancianos puedan seguir disfrutando de la salud suficiente para continuar en sus casas y con la asistencia que puedan necesitar directamente en sus domicilios.
En estos momentos son más de 700 los mayores que participan en la casi treintena de talleres que se han puesto en marcha y que están dirigidos a mejorar la salud física y emocional de los ancianos chicharreros.
Los talleres activos en este momento se reparten por todos los distritos, de forma que se ha hecho un esfuerzo, defienden desde Asuntos Sociales por llegar a zonas más complicadas como Anaga, donde tienen más problemas de transporte y aunque por el número de usuarios pudiera parecer que no es rentable, aseguran que se ha querido que se mantengan y así se desarrollan talleres en lugares como Almáciga o Taborno. Entre las actividades están algunas como la de Transmite y comparte, en la que se potencia la memoria de los mayores a través de que los participantes del taller recuerden y cuenten historia del barrio al que pertenecen.
Otros talleres potencian el ejercicio físico, como el de Camina en tu entorno, con el que se pretende que las personas mayores puedan moverse y hacer ejercicio previniendo así la dependencia. Desde Asuntos Sociales se pretende que en el futuro se pueda contar con una escuela de mayores en la capital.