TINERFE FUMERO | Santa Cruz de Tenerife

Efectivos de la Policía Local de La Laguna intervinieron ayer hachís y cocaína preparada para su menudeo en el interior de un kiosco situado en la intersección de las calles de Abreu y Valdés con la de José Domingo Dorta, en información facilitada por vías extraoficiales. Este servicio a la comunidad se prestó en la tarde del pasado martes, cuando un vecino alertó a las autoridades de que dicho kiosco se había convertido en un dispensario de droga.

Como quiera que una patrulla provista con un perro antidroga se encontraba en las inmediaciones, la intervención se realizó al poco de prestarse la colaboración ciudadana referida.
Nada más llegar al punto indicado, el encargado del kiosco aseguró que si encontraban algo no era de su propiedad, lo que vino a confirmar las sospechas de los funcionarios.
Tras el registro del interior del kiosco, el perro especializado señaló con claridad el congelador de los helados.

Dicho congelador se encontraba apagado y en su interior se encontró, además de la droga, dos tapones con gasoil, una medida que se utiliza entre los traficantes en su afán de confundir el olfato de los perros de la Unidad Canina, y que en este caso resultó estéril.

En el interior del congelador se halló más de un cuarto de kilo de hachís distribuido de distinta manera para atender a las necesidades del comprador.
Así, había un placa cercana a los 100 gramos de peso, otras tres que rozaban los 50, además de numerosas tiras.

En cuanto a la cocaína, la cantidad total intervenida se aproxima a los 15 gramos, e igualmente se encontraba repartida en bolsas de distinto peso.
A pesar de que el encargado del kiosco insistió en que la droga no era suya, tampoco quiso aclarar de quién era entonces, procediéndose a su arresto, así como a la incautación del Mercedes ML320 de su propiedad.