Ó. H. | Santa Cruz de Tenerife
El vicepresidente del CD Tenerife avanzó ayer que cuando acabe el mandato del Consejo de Administración en junio de 2016 no seguirá ligado a la entidad, pero matizando que “siempre” estará con el club, porque es “su familia”. “Uno tiene que tener un sentimiento y este club lo llevo dentro”, esgrimió Pedro Suárez, quien a lo largo de su vida ha colaborado de diferentes maneras con el representativo. “Jamás se podrá decir que yo haya criticado a un presidente porque sé que dentro se pasa muy mal”, comentó el empresario gomero. “Son muchos años y cada vez que me llame el club estaré; no me iré nunca”, continuó Suárez.
“Es el momento de dar paso con seguridad a un buen equipo de personas”, dijo en referencia al paso de nuevos miembros que llegarán a la institución, pero puntualizando que sí “luchará” por que el club “quede en manos de un equipo respetado”, entendiendo que este club “es una etiqueta y una marca fuera de la Isla” estando en Segunda División. De todos modos, Pedro Suárez no quiere anticiparse a los acontecimientos y solicitó esperar a su debido momento. “Nos queda esta temporada y la siguiente todavía”, señaló, para sugerir que se haga “una reflexión” a la hora de asegurar “tener al equipo el año que viene en Segunda División”, para después “hablar de las elecciones” y del proceso de relevo en el órgano de gobierno blanquiazul.
“Después ya se verá qué persona es la adecuada” para regir esta Sociedad Anónima Deportiva, explicó durante el acto de presentación del convenio firmado con la Fundación CajaMar para el apoyo al área de fútbol base de la entidad tinerfeña. “Ayudemos al equipo”, proclamó Pedro Suárez, quien no quiere que se siga especulando quién pude ser el sucesor de Miguel Concepción como máximo responsable del representativo. “Cuando queden tres meses hablaremos de elecciones”, reiteró el vicepresidente del CD Tenerife, quien pidió que no haya “división en la grada” hacia el conjunto insular. “Si hay división en la grada los jugadores se ponen blancos”, expresó sobre la presión extrema hacia los futbolistas locales.
Por último, Suárez dijo no tener dudas sobre la permanencia del equipo esta campaña en Segunda División: “Son cuatro puntos; estamos salvados…”, verbalizó, con la certeza de que los jugadores pondrán “lo que hay que tener” para acabar saliendo de la zona peligrosa”, finalizó un siempre expresivo Pedro Suárez.