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El Toscal de nunca jamás – Por Ignacio González Santiago

El Plan Especial del Toscal tampoco se aprobó en el último pleno del Ayuntamiento de Santa Cruz de Tenerife, celebrado el jueves, treinta de abril, como había anunciado a bombo y platillo, el Concejal de Urbanismo, José Ángel Martín (PSOE). Como toscalero afirmo que Martín ha sido para el Toscal el concejal más nefasto de la historia. Martín vuelve a equivocarse otra vez, sin que asuma ninguna responsabilidad, ni el Alcalde lo cese, mientras sus continuas y clamorosas equivocaciones perjudican gravemente al Toscal y al resto de los barrios de Santa Cruz.

La lista de pifias de Martín es ya más larga que la de Schindler, entre otras, el inacabado y desordenado PGO, el irreductible y judicializado mamotreto, la amenazante y aplazada ITE y el Plan Especial del Toscal, el de nunca jamás, que lleva tramitándose más de catorce años. El último error de Martín, el concejal más gafe de la actual Corporación municipal, impidió que el Plan Especial del Toscal fuera aprobado, después de catorce años, en el último Pleno. Martín reconoció públicamente que el error fue un defecto formal, cometido por la Gerencia de Urbanismo que él preside, o sea, por él mismo, aunque, como siempre, no asumió ninguna responsabilidad. ¿Se acuerdan de la carta que nos envió hace unos meses, amenazándonos con unas desproporcionadas multas de hasta 3.000 euros, si nuestras casas no pasaban la ITE? Aquella vez, la disparatada y desagradable encíclica levantó tal revuelo e indignación en Santa Cruz, que tuvo que mandar inmediatamente otra, rectificando y pidiendo perdón.

Ahora le tocó el turno al Toscal de sufrir las meteduras de pata del concejal socialista. Un barrio del Toscal que sigue abandonado: los comercios cierran, las casas se desploman, las calles están rotas, las aceras sucias, sin aparcamientos, bancos ni parques, y los solares abandonados, convertidos en estercoleros incontrolados y peligrosos. Un caos.

Como candidato a la alcaldía de Santa Cruz y toscalero, denuncio públicamente el pasotismo del alcalde con el Toscal, y le pido que cese inmediatamente al Concejal de Urbanismo por sus reiterados errores con este barrio, aunque sea lo último que haga. Si soy alcalde, me comprometo a arreglar el barrio, para que vuelva a ser lo que fue. Para ello, aprobaré definitivamente, si aún no lo estuviera, y ejecutaré por la vía de urgencia, el Plan Especial del Toscal.
Además, rescataré del cajón de la sociedad de Viviendas Municipales, S.A. y pondré en marcha los dos convenios de rehabilitación del barrio, el ARI (Área de Rehabilitación Integral) y el ARCH (Área de Rehabilitación del Conjunto Histórico), firmados ambos en 2005, y que nunca se iniciaron por la desidia del Ayuntamiento, a pesar de que la mayor parte de su ficha financiera, por un montante total de catorce millones de euros, la desembolsaban el Estado, la Comunidad Autónoma de Canarias y el Cabildo de Tenerife.

La rehabilitación de las casas y del conjunto del barrio, la limpieza de las calles y los aparcamientos son las principales demandas del Toscal. Además, faltan equipamientos culturales y deportivos.

Almeida es el lugar que el barrio necesita recuperar para construir todos esos equipamientos y los aparcamientos. El Ayuntamiento debe negociar con los militares para que el antiguo acuartelamiento de Almeida, sin uso militar, pase a la ciudad. Todos ganaríamos. Los vecinos del Toscal, porque dispondríamos de aparcamientos, canchas deportivas y un gran parque, que daría a la futura playa que propone el CCN, donde estaba la de San Antonio, delante de la Avenida Anaga; los militares porque su museo y la biblioteca militar, dos centros culturales de extraordinario interés, serían visitados y admirados por muchas mas personas y se ahorrarían el costoso mantenimiento del acuartelamiento; y la ciudad, porque ganaría un nuevo centro de interés cultural y turístico sin parangón, del que carece en estos momentos.

Un sitio en el que contar a los visitantes que lleguen a Santa Cruz, cuando construyamos la playa, nuestra gloriosa historia: el menceyato de Anaga, la conquista castellana y la fundación de la ciudad en Añazo, su evolución y crecimiento, primero, como puerto de La Laguna, y luego, como capital única de Canarias, hasta la división provincial, en 1927, los ataques de los piratas, siempre repelidos, y la victoria sobre el hasta entonces invicto Almirante inglés Nelson.
Si ustedes quieren, empezamos a partir del veinticuatro de mayo, ya queda menos para las elecciones.

*Candidato a la Alcaldía de
Santa CRUZ por el CCN