EUROPA PRESS | Santa Cruz de Tenerife
El Equipo de lucha contra el Robo en el Campo (ROCA) de la Comandancia de la Guardia Civil de Santa Cruz de Tenerife ha culminado la ‘Operación Rana’ donde ha imputado y detenido a ocho personas integradas en dos bandas organizadas que robaban herramientas en instalaciones agrícolas, en especial cuartos de aperos, y a los que se les imputan quince delitos de robo.
Los arrestados estaban perfectamente jerarquizados y organizados y actuaban en la zona norte de la isla, siendo la zona más afectada los municipios de La Matanza de Acentejo, El Sauzal, Tacoronte y La Laguna.
Estos dos grupos actuaron conjuntamente en su inicio, segregándose después, y aunque principalmente su actuación se centraba en cuartos de aperos, también se les relaciona con diversos robos acaecidos en bares, asociaciones de vecinos y en tiendas de productos animales.
MODUS OPERANDI
Para la comisión de los hechos delictivos y para asegurarse la impunidad, partían de una vigilancia de las inmediaciones por parte de una persona mientras que las otras actuaban.
A su vez otro era el encargado de conducir el vehículo para la carga de los efectos robados. Los implicados utilizaban guantes, pasamontañas, patas de cabra y cizallas para lograr entrar en los lugares donde era su objetivo.
Para dar salida a los diversos efectos y herramientas robadas, se efectuaban ventas en tiendas de compra y venta de segunda mano, en especial de una ubicada en La Laguna y otra en una céntrica calle de Santa Cruz de Tenerife, siendo objeto de investigación por parte de ese equipo las transacciones efectuadas por los arrestados.
El equipo ROCA, tras recabar todas la información necesaria realizó un registro domiciliario de uno de los autores, encontrándose números efectos procedentes de al menos 15 robos con fuerzas en las cosa acaecidos en el pasado año y en el transcurso de 2015.
Los agentes consiguieron localizar y recuperar más de 100 efectos sustraídos, característicos de cuartos de aperos, siendo destacables televisores, equipos de música, equipamientos de cocinas, sistemas de video vigilancia, dinero y tabaco procedente de robos de bares y asociaciones vecinales.
Los efectos, denunciados como sustraídos, se han entregado a sus propietarios. La totalidad de los robos, tanto en los daños ocasionados como en el valor de los efectos sustraídos, oscila sobre los 40.000 euros aproximadamente.
El Equipo ROCA continúa con las investigaciones para recuperar más efectos sustraídos y analizar la posible relación de las bandas en otros hechos delictivos.