De sobra es conocido el techo salarial que impone la Liga de Fútbol Profesional a los clubes de Primera y Segunda. En el caso del CD Tenerife, se trabaja con la base de que el tope salarial va a crecer para la próxima campaña, más aún si se adelanta la entrada en vigor del Real Decreto que permitirá la venta centralizada de los derechos de televisión. Así y todo, la economía blanquiazul vuelve a ser un obstáculo a la hora de salir al mercado a buscar jugadores; sobre todo aquellos por los que se pide más dinero: los delanteros. Chuli, Ángel y Sergi Enrich son los más deseados, siendo los dos primeros los preferidos en la lista de la compra de Alfonso Serrano.
Clubes como Zaragoza, Mallorca, Almería, Córdoba, Leganés, Oviedo y CD Tenerife pugnan por intentar convencer a esos delanteros para que sean parte del proyecto de cada uno de ellos la próxima campaña. Los tinerfeños esperan por la respuesta de Ángel, que cuenta con ofertas superiores de la Liga Adelante y del extranjero. Lo mismo pasa con el bético Chuli, por el que hay una especie de subasta abierta en la que el Real Betis lo venderá a quién acepte las elevadas condiciones de traspaso que solicita, y luego pueda hacer frente a la ficha del jugador, que ha aumentado al ascender el club andaluz a Primera. En cuanto al menorquín Enrich, otro de los mejores artilleros de la pasada temporada en las filas del Numancia, no ha trascendido el interés del CD Tenerife, pero los clubes españoles que han preguntado por él se han encontrado con la traba económica, al manejar una oferta en firme, suculenta en lo deportivo y en lo pecuniario, del Bolton inglés.
El mercado inglés, principalmente de la Championship, la Segunda División británica, tienta también a otros futbolistas de ese perfil, sabiendo los clubes españoles de nivel medio en Segunda que no pueden competir con la libra. Pero, aparte de esos jugadores, el CD Tenerife sabe que, en las actuales condiciones, tampoco puede hacer frente al sueldo de futbolistas como los tinerfeños Jeffren Suárez y Omar Ramos, que podrían salir este verano del Real Valladolid; dos futbolistas que encajarían muy bien en la fisonomía del Tenerife 15-16 de Raúl Agné, al igual que otros dos jugadores de banda, y también tinerfeños, por los que sus respectivos clubes piden una compensación económica para dejarlos salir, como son los casos de Iriome, en el Lugo, y Édgar Méndez, en el Almería.
Unas dificultades que el CD Tenerife viene sufriendo desde hace varias temporadas, pero que en esta ocasión afecta a bastantes clubes de la categoría, que están supeditados a los rigurosos controles económicos de la LFP, pero que esperan todos el incremento inmediato de los ingresos por televisión para poder disponer de crédito para fichar.