positivando >

Perder para ganar – Por José Juan Rivero

No te has planteado alguna vez lo mal que nos llevamos con la derrota, el entender que en ocasiones podemos perder, las sensaciones que se generan tanto a nivel personal, como a nivel profesional o incluso como una experiencia de ocio, por ejemplo a través del deporte, donde pasan por una sensación general de frustración y miedo? En la misma línea te planteo si te has fijado en ese modelo de éxito vital que nos venden donde desde pequeños nos enseñan que la vida debe ser como una competición, parece que siempre unos ganan y otros pierden pero únicamente los que ganan parece que consiguen el Santo Grial de la Felicidad. Sin duda alguna, a las personas, cuando interpretan que han experimentado una derrota en algún elemento de su vida, les supone una experiencia muy negativa. Parece existir una tendencia a entender que el mundo debemos de interpretarlo bajo la visión sobreprotectora entendiendo que debemos de ser capaces de conseguir todo, pero no con lucha, sino que nos llega sin más. Sin embargo, no tardamos mucho en darnos cuenta de que eso no es tan sencillo y la frustración se apodera de nosotros. Poco a poco comienzas a ver cómo nuestro sistema está destinado a garantizar nuestra supervivencia, todo ello hace que contemos con un gran sistema emocional, que en esas condiciones funciona a la perfección. Sin embargo, cuando se trata de experimentar elementos que no controlamos, como es el no poder conseguir nuestros objetivos y sentimos que perdemos, nos frustramos con gran facilidad y gestionamos inadecuadamente esas situaciones. Efectivamente, todo ese proceso de lucha constante, de superación de objetivos personales, sociales y culturales hace que en las ocasiones que perdemos tendamos a gestionarlos volviendo a nosotros, y acabamos mirándonos el ombligo, y nos volvemos algo egocéntricos. Estamos hablando de cómo gestionamos nuestra posición con respecto a nuestro mundo y nuestras creencias y nuestros modelos de éxitos personales. En cuántas ocasiones habrás oído aquella afirmación de que debemos de saber perder, y saber ganar, creo que en ocasiones es tan importante una como otra, ya que ganar implica saber gestionar adecuadamente tus emociones, tus herramientas y entender ambas situaciones. Pero la conclusión a la que llegamos es que para garantizar nuestro bienestar en necesario entender que perder es necesario; que debemos aprender de esas situaciones donde caerse significa levantarse. Así, en esa línea debes entender que solo te queda aprender a levantar la cabeza, y ponerte en pie.

*Psicólogo y miembro de la Sociedad Española de Psicología Positiva
@jriveroperez