Muchos canarios se peguntan: ¿cómo será el nuevo Gobierno de Canarias? ¿Qué aportará a la sociedad canaria? Bueno, supongo que todo cambio será para mejorar lo presente, aunque en algunas ocasiones no ha sido eso precisamente, pero hay que apostar siempre por un cambio positivo, especialmente cuando el voto se refugia en las urnas democráticas. Si los pactos se consolidan en sus mutuos acuerdos, Fernando Clavijo será el nuevo presidente de todos los canarios, teniendo sede presidencial en los primeros cuatro años en Gran Canaria. Paulino Rivero se va, pero no como cuando fue un importante alcalde de El Sauzal. Como presidente, se va con más pena que gloria, motivado por múltiples problemas que ha tenido que afrontar desde muchos puntos sociales, políticos y económicos. Ciertos es que a lo largo de su mandato ha tenido apostados a muchos francotiradores en muchos edificios del Archipiélago canario. Mercenarios de la información que extendieron sus plumas para ponerlo sobre un pedestal y más tarde acribillarle con mofas, insultos y chantajes emocionales. Por otra parte, la denominada casta política y periodística, los cuales nunca le perdonaron que viniera del seno de una familia humilde y trabajadora. Me comentaba un buen amigo que: “El pobre en la mesa del rico no tiene honor”. Así es, el pobre rara vez ha sido admirado y respetado en la casta social del rico. Si yo les hablara de las castas sociales de la sociedad tinerfeña de mi infancia, pero no merece la pena, ya que todo ello me provoca un desgaste mental y al final no merece la pena. No obstante, Paulino Rivero también ha tenido sus desaciertos y en momentos puntuales perdió el control de la brújula de su Gobierno. En fin, otra etapa cerrada y el comienzo de otra que será muy importante para los intereses de Canarias. Fernando Clavijo, tras una dura campaña de desprestigio y acusaciones, superada con valentía, se erige como la nueva esperanza del pueblo canario. Démosle la oportunidad de los primeros 100 días para ver cómo es el comienzo de esta carrera de fondo. Veamos cuál será su equipo de confianza y el compromiso de su trabajo. Sin duda, no será nada fácil, aunque el Gobierno central diga que ya comenzamos a despegar de la actual crisis económica. Canarias necesita de muchas cosas, especialmente de un revulsivo que demuestre las cosas con hechos y no solamente con palabras. Que encuentre soluciones para los múltiples problemas que tienen en estos momentos la sociedad canaria. No creo en los milagros, pero si en la voluntad, compromiso, esfuerzo y trabajo en las personas. Si eso lo lleva a cabo el nuevo Gobierno de Canarias, seguramente logrará aliviar las fatigas, el sueño y el dolor de muchos canarios. Y en lo que respecta a la oposición, en lugar de criticar, que ayude para remar entre todos en la misma dirección. Eso también es una forma de ayudar a nuestra tierra.