El interventor de la Empresa Mixta de Aguas de Santa Cruz (Emmasa) ha entregado al Consistorio las primeras conclusiones de su trabajo en la citada empresa, aunque este seguirá desarrollándose durante el mes de agosto sobre los aspectos más polémicos, subcontrataciones e inversión. La primera de las conclusiones a las que sí ha llegado el interventor tiene que ver con la necesidad de establecer mecanismos de control sobre la gestión de Emmasa, puesto que, tal y como reconoció el edil de Servicios Públicos, Dámaso Arteaga, hasta ahora “no había estos mecanismos”, por lo que se inicia con la creación de este órgano un “verdadero control” de la actividad de la empresa.

Arteaga detalló que esta comisión, formada por dos vocales del Ayuntamiento y otros dos de Emmasa, supervisará la información que de forma periódica ha de enviar la empresa al Consistorio, datos que se concretan en la obligación de presentar anualmente la cuenta de Pérdidas y Ganancias y las inversiones previstas en cada ejercicio y, con periodicidad mensual, hacer llegar a la comisión la evolución de la actividad de la empresa. Además, este órgano de control podrá solicitar cuanta documentación estime necesaria para el desarrollo de sus funciones. La empresa tendrá 10 días para responder.

La segunda de las conclusiones apuntada por Arteaga tiene que ver con el denominado know-how de la empresa, es decir, el conjunto de conocimientos técnicos y administrativos indispensables para desarrollar el acto comercial, apartado en el que, asegura el interventor, no se ha producido ninguna conducta susceptible de ser sancionable. “En este punto se trataba de reconducir a la legalidad la situación, ya que la auditoría cuestionaba el posible doble cobro por este concepto”. Se refiere el concejal al cobro anual del 5,5% y a la subcontratación a la vez de directivos por el mismo concepto. “Esta cuestión se solventó en 2014 cuando se acordó la contratación de los directivos como personal de Emmasa”. Para valorar este apartado, el interventor analizó datos técnicos y económicos de Emmasa desde 2006 y hasta 2014, llegando a la conclusión de que se han producido mejoras en la gestión y que se ha reducido el coste de la prestación del servicio.

Reducción de costes
En este último apartado, Arteaga detalló que el porcentaje de coste sobre ingresos se ha reducido del 93% entre 2003 y 2005, al 72,6% entre 2011 y 2014, un porcentaje que subiría hasta el 86% si se suma el coste del 5,5% del know how. En cualquiera de los casos, “hay una reducción importante en materia de costes desde que era pública hasta ahora”, concluyó Dámaso Arteaga, quien confía en que para septiembre estén el resto de conclusiones.

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El mantenimiento de pluviales, a estudio

En el marco de la intervención de Emmasa y de la aclaración de competencias y gestión que se está llevando a cabo, el Ayuntamiento ha iniciado un expediente de reclamación paralelo para aclarar de quién es la competencia del mantenimiento de los imbornales destinados a la recogida de agua de lluvia que no estén acoplados a la red de saneamiento. Se trata de las canalizaciones que recogen los pluviales y la vierten directamente en el barranco o las que se ubican en parques y jardines.

Según parece, Emmasa se niega a realizar ese mantenimiento alegando que debería ir recogido en otro contrato, puesto que su responsabilidad se limita a lo que afecta a las redes de saneamiento.

Por su parte, el Ayuntamiento opina lo contrario y por eso ha iniciado un expediente para dirimir la responsabilidad de este mantenimiento y que afecta, entre otras, a las nuevas obras de pluviales de la capital.[/sws_grey_box]