SANIDAD

Más de 8.000 jóvenes canarios sufren algún trastorno alimentario

La Consejería imparte periódicamente charlas a médicos de Primaria sobre anorexia y bulimia. / DA
La Consejería imparte periódicamente charlas a médicos de Primaria sobre anorexia y bulimia. / DA

Los trastornos de la conducta alimentaria (TCA) son afecciones que se caracterizan por una alteración de los hábitos de ingestión de alimentos y de la imagen corporal, con graves consecuencias para la salud, pues pueden conllevar la aparición de problemas físicos, como pueden ser situaciones de carencia de algún nutriente y también a la aparición de alteraciones en la funciones corporales, psicosociales o ambas (alteración de la relación del individuo con el alimento y su entorno). En Canarias, según confirman los expertos, en los últimos años se ha experimentado un notable aumento de los casos de TCA en menores y adolescentes, hasta el punto de que actualmente el 4,5% de los jóvenes isleños de entre 12 y 19 años (más de 8.000) padece algún trastorno alimentario, especialmente anorexia y bulimia.

Por este motivo, y enmarcado dentro del Programa de Intervención para la Prevención de la Obesidad Infantil (Pipo), la Consejería de Sanidad ha decidido dedicar un espacio específico en Internet a los trastornos alimentarios, que según los responsables de la Dirección General de Salud Pública “cada vez son más frecuentes y empiezan a edades más tempranas”. Las mismas fuentes exponen que “afectan mucho más a las mujeres (90%) que a los hombres (10%), siendo más vulnerables algunos grupos como gimnastas, azafatas, bailarinas y modelos”. Los tipos más conocidos son la anorexia y la bulimia nerviosas, aunque en la actualidad son mucho más frecuentes los trastornos incompletos denominados Trastornos de la Conducta Alimentaria No Específicos (TCANE). Igualmente, en los últimos años han surgido otras alteraciones de la conducta alimentaria, que no están reconocidas por todos los expertos, como son la ortorexia (obsesión por comer comida sana) y la vigorexia (excesiva preocupación por el físico).

Afectan mucho más a mujeres que a hombres, sobre todo de entre 12 y 19 años de edad

Desde Sanidad subrayan que “las causas pueden ser múltiples; influyen factores genéticos, biológicos, psicológicos, sociales y culturales. Los factores genéticos, psicológicos y biológicos hacen al individuo más vulnerable a las influencias sociales y culturales (como es el culto a la delgadez), que actúan como desencadenante del trastorno”. “La mayoría de los casos se inician con dietas de adelgazamiento sin control profesional”, denotan desde Salud Pública, quienes exponen que “también pueden aparecer por el hecho de no aceptar los cambios corporales de la pubertad, por complejos físicos, tras el fallecimiento de un ser querido, por conflictos con los padres o la pareja, etc”. Para detectar y atajar estos trastornos, la Consejería de Sanidad puso en marcha en 2010 un protocolo de actuación tanto para los médicos de Primaria como para los profesionales de las unidades de Salud Mental.

La guía puede ser consultada también por las familias en la página web de Sanidad.