Si acudir al médico ya de por sí no es plato de buen gusto, hacerlo durante una ola de calor y soportar casi 40 grados dentro del centro de salud puede llegar a convertirse en un infierno para muchos pacientes. Estas situaciones, aunque desgraciadamente no son nuevas, han vuelto a repetirse en los últimos días en muchas instalaciones sanitarias de la isla de Tenerife, que siguen careciendo de aire acondicionado y otras deficiencias estructurales de relevancia.

Como ejemplos, desde el Sindicato Médico (CESM) en la provincia de Santa Cruz de Tenerife citan la planta 4ª de Maternidad del Hospital Universitario de Canarias (HUC), donde madres que acaban de dar a luz y sus bebés tienen que soportar altas temperaturas al carecer la zona de refrigeración. “Estaba previsto ponerla hace unos meses, pero todavía no la han instalado”, subrayan desde el CESM.

En la misma situación se encuentra en el Centro de Atención Especializada (CAE) de San Benito, en La Laguna, donde han llegado a estar a más de 30 grados dentro del propio edificio. Este apenas ha sufrido reformas en el último lustro, lo que ha obligado a médicos y enfermeros a costear de su bolsillo la compra de aparatos de aire acondicionado para poder sobrellevar mejor las jornadas calurosas.

En el Sur, mientras, el Sindicato Médico confirma que hay más de media docena de ambulatorios donde también se están sufriendo con crudeza los rigores del verano, especialmente en las salas de espera y las zonas comunes de los centros. En las consultas, muchos profesionales han optado por llevarse sus propios ventiladores o los socorridos pingüinos para aguantar las jornadas más duras del estío, en muchas de las cuales los termómetros han superado los 35 grados centígrados.

“En algunos centros de salud se está instalando ahora el aire acondicionado, o se está arreglando el que ya estaba, pero estamos casi en agosto y la Consejería no ha concluido unas obras que debían haber finalizado antes de que llegara el calor”, expone el secretario general del CESM en la provincia de Tenerife, Levi Cabrera.

Episodios de calor
“En las salas de espera de los centros donde no hay refrigeración o donde el aire está estropeado, se pasa especialmente mal, sobre todo las personas mayores y los niños de corta edad”, incide Cabrera, quien recuerda que “es una situación que se viene repitiendo en los últimos años, y cuando se suceden los episodios de calor, el problema se recrudece, porque estamos hablando de instalaciones sanitarias a las que acuden personas con distintas patologías, muchas de las cuales se ven agravadas con las altas temperaturas”.

En su opinión, “lo ideal sería acometer obras para instalar aire acondicionado en todos los centros sanitarios del Archipiélago, pero se trata de una inversión que el Servicio Canario de la Salud nunca ha considerado”, denota el dirigente del Sindicato Médico, quien reitera que este problema está “íntimamente relacionado con las carencias estructurales, la falta de infraestructuras y los recortes en este tipo de inversiones que ha llevado a cabo la Consejería con la excusa de la crisis”.

“Llevamos años denunciando que hay centros de salud con mucha antigüedad, algunos de los cuales tienen casi 30 años; y, sin embargo, desde el año 2010 la partida destinada a mantenimiento y mejora de los centros de salud de Canarias quedó reducida prácticamente a cero”, concluye Levi Cabrera.

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Mayor preocupación ciudadana y más quejas

En la macroencuesta del Gobierno de Canarias sobre las prospecciones petrolíferas, dada a conocer a finales de noviembre de 2014, se recogían también otros asuntos de interés social, económico y político. Entre ellos, la parte del estudio dedicada a tratar de conocer cuáles eran las principales preocupaciones de los ciudadanos de Canarias. En lugar destacado, y con un elevado porcentaje, aparecía la sanidad. En concreto, en una pregunta con respuestas múltiples, tras el desempleo (90,6%) se situaba la sanidad, con el 64,2%, veintiún puntos por delante de la educación (43,25%). Con algunas diferencias entre los distintos municipios, los encuestados de las islas de Tenerife (66,3%) y Gran Canaria (64,2%) encabezaban la lista de mayor inquietud ante la evolución del sistema sanitario isleño.

Esa negativa percepción sobre la calidad de la asistencia sanitaria se ha acrecentado en los últimos tiempos. Son cada vez más frecuentes las críticas de usuarios y profesionales que denuncian problemas vinculados a las listas de espera, la falta de personal o deficiencias en las infraestructuras, especialmente durante los meses de verano e invierno. Según denuncian los sindicatos, la media de antigüedad de los centros de salud isleños supera los 15 años.[/sws_grey_box]