SOCIEDAD

Primera cumbre antidesahucios

En primer plano, Andrés Orozco (Caixabank), Patricia Hernández y Fernando Clavijo, ayer en Santa Cruz de Tenerife. / DA
En primer plano, Andrés Orozco (Caixabank), Patricia Hernández y Fernando Clavijo, ayer en Santa Cruz de Tenerife. / DA

El nuevo Gobierno de Canarias ejemplificó ayer que una de sus prioridades pasa por acabar con los desahucios de familias en el Archipiélago provocados por la crisis socioeconómica cuyos efectos siguen perjudicando a miles de isleños. No en balde se trata de uno de los proyectos en los que tiene un particular empeño la actual vicepresidenta, Patricia Hernández, a su vez consejera autonómica de Vivienda.

Dada la importancia del asunto, tanto Hernández como el propio presidente, Fernando Clavijo, celebraron lo que bien podría considerarse la primera de una serie de cumbres antidesahucios para informar a las distintas entidades financieras de la próxima creación de la Oficina de Intervención Hipotecaria. Estas reuniones aspiran a que las propias entidades participen de dicha iniciativa gubernamental, si bien también se citará a las plataformas antidesahucios.

La cita de ayer tuvo como interlocutor a Andrés Orozco, delegado territorial de Caixabank, una de las entidades financieras con mayor peso en todo el Archipiélago. En declaraciones a los periodistas, Fernando Clavijo valoró la labor que realiza La Caixa en este campo y cree que “es bueno que se protocolice y no quede al albur de voluntades personales”.

Por su parte, Hernández explicó que el principal objetivo es que toda la información llegue a los ciudadanos “que lo necesitan y no parta de la buena voluntad de una entidad”, ya que no se trata solo de la pérdida de una vivienda, sino que es un “desahucio de vida”.

En esa línea, la vicepresidenta detalló que el Gobierno regional estudia cerrar convenios con las entidades y la administración de justicia para que la Oficina pueda acceder a los expedientes “y el ciudadano sea informado de sus derechos” y las reestructuraciones de deudas, quitas o alquileres sociales, queden en manos de la banca. Sobre la modificación de la Ley Canaria de Vivienda, suspendida por el Constitucional, dijo que Canarias no renunciará hasta que haya un fallo definitivo, si bien maneja “otras alternativas” que no pasan por llegar al “extremo” de la expropiación temporal del derecho de uso.

Orozco, por su parte, reivindicó la política de “cero desahucios” desde el inicio de la crisis de su entidad, y transmitió a Clavijo y Hernández sus “soluciones” relacionadas con la primera vivienda. En esta línea, el ejecutivo manifestó que la Oficina “será un recurso más” para que los ciudadanos vean “protegidos sus intereses”, aunque aún está en fase de “puesta en marcha”. Sobre su participación en el proyecto, fue claro: “La Caixa seguirá haciendo lo que viene haciendo, no hacer ni un solo desahucio a familias”. Además, Orozco presumió de que Caixabank “es el banco más comprometido” de Canarias, con programas segmentados en los estratos “más delicados” de la sociedad como niños, mayores, enfermos avanzados o colegios. “Hay compromiso real y firme”, concluyó.

[sws_grey_box box_size=”100″]Hernández: “Habrá firmeza para terminar con las cláusulas abusivas”

Con motivo de la reunión mantenida en la sede santacrucera de Presidencia del Gobierno, la vicepresidenta del Gobierno de Canarias y consejera de Vivienda, Empleo y Políticas Sociales, Patricia Hernández, expuso ayer al director territorial de La Caixa, Andrés Orozco, la “firmeza” del Ejecutivo por “acabar” con las cláusulas abusivas de la banca.
En declaraciones que recoge Europa Press, Hernández explicó que esta solicitud va en línea con el programa de gobierno de Coalición Canaria y PSOE, a la par que insistió en que la vivienda de primera necesidad no puede destinarse a la “especulación” y el “negocio”, por lo que exigió también la eliminación de las cláusulas suelo.

Orozco, por su parte, reconoció que el Gobierno “tiene que velar por las cláusulas abusivas y ponerlas encima de la mesa”, y en el caso concreto de Caixabank, realiza gestiones individualizadas con sus clientes. “No las tenemos en nuestra casa. En nuestro banco la letra pequeña no existe, si alguien la entiende abusiva, se sienta, se habla y se arregla”, destacó.

Buena parte de la banca española se significó desde 2007 por recomendar a sus clientes determinados productos que posteriormente demostraron ser tóxicos para los mismos al tratarse de ahorradores nada indicados para semejantes especulaciones. La lista es larga: clips, swaps, hipotecas multidivisas, preferentes, cláusulas suelo… Siendo una práctica general, ni todos los bancos lo hicieron, ni todos engañaron en todo a sus clientes.[/sws_grey_box]