El Iberostar Tenerife anunció ayer lo que era un secreto a voces: la salida del club tinerfeño del base guipuzcoano Ricardo Uriz, que no seguirá en la plantilla canarista tras tres temporadas de militancia. Durante la última campaña, Ricardo promedió 4,5 puntos y 4,05 asistencias en los 19,5 minutos de media de los que dispuso para una valoración de 7,5 créditos por encuentro. Por el camino, se convirtió además en el máximo asistente de la historia canarista en la ACB, superando los registros anteriores de Carmelo Cabrera. El club tinerfeño quiso agradecer “de manera encarecida”, a través de una nota oficial, la labor desempeñada por Uriz las tres últimas campañas, “siendo una de las piezas fundamentales en el proyecto canarista en la élite”, y le desea “la mejor de las suertes en su futuro personal y profesional”.
CARTA DE DESPEDIDA
Por su parte, Uriz dijo a Teide Radio que se marcha del club “sin resquemor ni pasar facturas”, ya que entiende que en la vida de un deportista profesional esto está “a la orden del día”. El vasco explicó que la decisión “oficial” la supo “hace varios días”, pero que ya se “olía algo” desde final de la temporada, cuando el club le comunicó que iba a “buscar otras opciones” para su puesto. Así y todo, Ricardo Uriz quiso subrayar la importancia de los “jefes” del club, tanto Félix Hernández en la presidencia, como Aniano Cabrera en su parcela y Alejandro Martínez en la faceta de entrenador. Sobre su futuro más inmediato, aseguró que “todavía no hay nada concreto”, y que a partir de ahora se centrará en definir en qué club jugará la temporada 2015-2016. En cualquier caso, Ricardo Uriz quiso enfatizar “lo bien”, que ha vivido, él y su familia, en Tenerife este trienio, donde siempre se ha sentido “muy querido y muy bien tratado”.
Ricardo Uriz también quiso decir adiós mediante la publicación de una carta de despedida en su perfil de Twitter: “Hace tres años comenzó mi aventura en Tenerife gracias a la confianza que tanto Félix, Aniano como Alejandro depositaron en mí para unirme a este club. Siempre les estaré agradecido. A pesar de que mi adaptación a la vida insular no fue inmediata, las cosas no son como empiezan, sino como acaban. Llegué a un club recién ascendido a la ACB y ahora me voy dejándolo ya consolidado en esta Liga. Así que me voy contento y con la satisfacción de haber hecho bien mi trabajo. Espero que me recordéis como un jugador que lo dio todo por esta camiseta y que peleó siempre hasta el final.
Gracias también a todos los que formáis parte del club, cuerpo técnico, empleados, compañeros de equipo… porque siempre habéis estado ahí para cualquier cosa que he necesitado y me he sentido tratado con cariño y respeto. Gracias a la afición aurinegra, que es tan fiel, estando ahí en los buenos y en los malos momentos, dispuesta a animarnos y a apoyarnos, ganemos o perdamos, siempre esperándonos incondicionalmente tras cada partido. No dejéis de hacerlo. Pero no sólo he de agradecer la experiencia deportiva que se me ha brindado, sino también la que a nivel personal ha supuesto tanto para mí como para mi familia. No podría nombrar a todas esas personas que nos han acompañado, ayudado y alegrado durante nuestra estancia en la Isla, porque sóis muchísimos. A todas os llevamos en el corazón, y no hay palabras para agradecer eso. Yo guardaré siempre dentro de mi un gran recuerdo de mi paso por esta gran familia, y espero que vosotros también. Gracias y hasta siempre”, fueron las palabras afectuosas de un jugador que nunca hizo ruido fuera de las canchas.
Por otro lado, el club aurinegro debe seguir definiendo en los próximos días la configuración de su plantilla, y cerrar los sustitutos para los que ya no están: Luke Sikma, Levi Rost y ahora Ricardo Uriz, sin menoscabo de aclarar la situación de jugadores como Fotios Lampropoulos o Jaime Heras.