La situación del Complejo Costa Martiánez -conocido popularmente como el Lago- de Puerto de la Cruz ha dado un vuelco en el último año, después del proceso de rehabilitación y el aumento de visitantes que se ha registrado en los últimos meses. Tanto es así que el consistorio portuense ya no tiene dudas sobre la idoneidad de mantener la concesión que recibió de Costas hace casi medio siglo, y que vence en julio de 2018.

En este sentido, la concejal de Gestión Económica y Cultura, Sandra Rodríguez, reconoció al DIARIO que se han mantenido varias reuniones en Madrid y Tenerife con los responsables de Costas con el objetivo de lograr una prórroga de 25 años en la concesión del Lago, uno de los principales atractivos de la ciudad y de todo el Archipiélago. No en vano, el complejo está declarado Bien de Interés Cultural (BIC), catalogado como Jardín Histórico, y condensa una parte destacada de la obra del artista lanzaroteño César Manrique, como el Homenaje al mar, que ha sido rehabilitado recientemente. En el Lago Martiánez, además, trabajan actualmente 70 personas, entre personal del propio ayuntamiento portuense y de la empresa municipal Pamarsa, que se encarga del mantenimiento y limpieza de la instalación.

“Se ha entregado a Costas un estudio exhaustivo de la prestación del servicio, y ellos están interesados en que continúe la gestión municipal”, subraya Sandra Rodríguez, que recuerda que después del Siam Park, el Lago está considerado como la atracción turística más visitada de toda Canarias en estos momentos (según datos recogidos por la web especializada Trip Advisor).

La concejal de Cultura, no obstante, reconoce que el complejo “ha pasado momentos muy difíciles” en los últimos años debido a la crisis económica y la bajada de la afluencia de turistas, pero el aumento de la inversión y la mejora de la situación han relanzado el Lago, que además “ha mejorado la imagen y el mantenimiento de las instalaciones”. De hecho, esta misma semana el Pleno municipal aprobó una ampliación de crédito de 36.000 euros para mobiliario del complejo, fundamentalmente hamacas nuevas y parasoles, que serán financiados por el Consorcio Urbanístico para la Rehabilitación de Puerto de la Cruz.

“Se trata de un espacio complejo, que supone un desembolso presupuestario de entre 500.000 y 700.000 euros al año para el ayuntamiento, al margen de los ingresos y gastos que se producen por las entradas de usuarios y el propio mantenimiento”, subraya Sandra Rodríguez, quien recordó que además de Pamarsa también existe una concesionaria para los servicios de restauración y otra que gestiona la llamada Isla del Lago, subarrendada a su vez por el titular, el Casino. “Entendemos que el Complejo Costa Martiánez debe estar en manos de lo público, y en esa línea estamos trabajando”, agrega Rodríguez, quien insiste en que “lo prioritario ahora es conseguir esa prórroga de Costas, y a partir de ahí se podrá trabajar en mejorar la gestión y la prestación de servicios”. “Estamos cumpliendo todos los parámetros económicos y hemos saneado las cuentas, por lo que estamos en condiciones de mantener una instalación que es un referente turístico de la ciudad”.

Un profundo ‘lavado de cara’

El Ayuntamiento del Puerto de la Cruz, después de años de recortes, ha empezado a destinar más presupuesto para el mantenimiento de las instalaciones. Por ejemplo, la partida en pintura pasó de cero euros en 2012 a 15.000 euros en 2013 y 50.000 el año pasado. También se han realizado actuaciones en la piscina infantil de La Jibia y en el Monumento al Mar de César Manrique, que será reabierto después de una profunda remodelación financiada por el Consorcio y presupuestada en 60.000 euros. De igual modo, se han mejorado los accesos y las zonas verdes del complejo, así como las duchas y vestuarios.