Misión Imposible, nación secreta

Doppelgänger – Por Manuel E. Díaz Noda

Protagonizada y producida por Tom Cruise y dirigida por Christopher McQuarrie, en Misión Imposible. Nación Secreta, Ethan Hunt se las tiene que ver con el renegado Solomon Lane, versión siniestra de nuestro héroe y líder del Sindicato, un grupo similar a la Fuerza Misión Imposible, pero con propósitos más sombríos.

Evidentemente, Tom Cruise ejerce de estrella absoluta en la película y con todas las de la ley. A sus 53 años el actor se exhibe más pletórico y en forma que nunca, poniendo en riesgo su propia integridad física de manera continua. Sean Harris compone un excelente némesis, inquietante, frío y calculador, reverso tenebroso de Hunt, que da una mayor categoría a la película. Frente a la posición secundaria y prescindible de los personajes de Jeremy Renner y Ving Rhames, se agradece el mayor protagonismo de Simon Pegg como contrapunto humorístico, pero sobre todo, debemos destacar la impresionante presencia de la actriz Rebecca Ferguson, quien no se queda a la zaga de Tom Cruise en lo referente a las escenas de riesgo y compone con diferencia la mejor partenaire de Ethan Hunt hasta la fecha.

Tras dirigir a Cruise en Jack Reacher, Christopher McQuarrie realiza aquí una labor mucho más afinada, de la que tenemos que aplaudir la elegancia y la sobriedad de la puesta en escena, así como la elaboración de un libreto mejor hilvanado y con diálogos más cuidados de los que habitualmente encontramos en este tipo de producciones. Importante es también reconocer la importancia del trabajo del veterano Gregg Smrz a cargo de la segunda unidad. Smrz se ha enfrentado a un total de seis elaboradísimas secuencias de acción, arrancando con la mencionada secuencia del Airbus y pasando por set pieces tan complejas como todo el metraje en la ópera de Viena o una espectacular persecución en moto.

Misión Imposible. Nación Secreta consigue mantener el listón de la saga, e incluso nos atreveríamos a decir que aventaja la excelente labor de sus antecesores. Se trata de un excelente divertimento, que no defraudará a los seguidores de la franquicia y que por méritos propios podemos situar ya entre lo más disfrutable que hemos podido ver en las pantallas este verano.