SOCIEDAD

Las familias de las víctimas piden al Estado que asuma su “culpa”

Los familiares de las víctimas y afectados por el accidente del vuelo JK5022 de Spanair recordaron ayer la tragedia que hace siete años segó la vida de 154 personas, exigieron una vez más justicia y pidieron al Parlamento que investigue las causas del percance en una comisión.

Por séptimo año consecutivo, los familiares de los fallecidos se reunieron en el aniversario de la tragedia en el aeropuerto Madrid-Barajas Adolfo Suárez, en un sentido homenaje que contó con la presencia de la ministra de Fomento, Ana Pastor, quien manifestó su apoyo a todos los afectados.

La titular de Fomento se dirigió a la presidenta de la Asociación de Afectados del vuelo JK5022, Pilar Vera, para transmitirle su especial agradecimiento por la lucha durante los últimos años en la mejora de los protocolos de seguridad y de asistencia a las víctimas de accidentes aéreos. En concreto, aplaudió la reciente creación, gracias al impulso de la asociación que dirige Vera, de la Federación Internacional de Víctimas de Accidentes Aéreos y sus Familias, en trámites de ser reconocida a nivel internacional en los foros públicos y privados del transporte por aire.

Durante su intervención y en una posterior rueda de prensa, Vera achacó a la Justicia cobardía y al Estado pasividad frente a una aseguradora que, a su juicio, “ha querido hacer de las víctimas un negocio”, y pidió la creación de una comisión parlamentaria que investigue las verdaderas causas de la tragedia.

En esta línea, hizo un llamamiento a todos los partidos políticos, de dentro y fuera del arco parlamentario, en el que piden un contrato social, similar al que se firmó en Valencia tras el accidente de metro, con el objetivo de que se modifique la normativa necesaria para que las víctimas tengan prioridad frente a las aseguradoras. Concretamente, piden que “no se aplique a tragedias con víctimas múltiples” el “baremo creado para sostener la industria del seguro”, que se repare el daño con arreglo a la póliza contratada y que esta sea de aplicación para las víctimas de Spanair, algo que, según expuso, no se ha cumplido. Pilar Vera adelantó que, una vez cerrada la vía penal en España para pedir responsabilidades a directivos y a la aseguradora Mapfre, van a llegar hasta el Tribunal Superior de Justicia Europeo con el fin de ganar la batalla legal, aunque van a seguir exigiendo también que se reabra la causa en España.

Dentro del llamamiento incluyó otra solicitud para que este tipo de causas se revisen en los juzgados centrales de instrucción y no en la justicia ordinaria, que, a su juicio, no está preparada para procesos judiciales de esta magnitud. “No estamos hablando de una cosa material, hablamos de la sangre de los fallecidos y del sufrimiento de los nuestros”, concluyó Vera en la rueda de prensa, momentos después de una ofrenda floral celebrada a la entrada del aeropuerto. Allí, familiares, allegados y amigos posaron ramos de flores sobre los nombres de las víctimas de la tragedia, grabadas en unas placas metálicas dispuestas en círculo, debajo de un olivo plantado en uno de los jardines cercanos a la Terminal 2, en homenaje a las vidas perdidas.
Posteriormente, una lectura de poemas y la interpretación al violonchelo de canciones populares canarias tiñeron de emoción el primer acto del homenaje, que concluyó con el rezo de un breve responso. Acompañados de autoridades y personalidades públicas, los familiares acudieron luego al anexo de la pista 36L de la Terminal 2 en la que se estrelló hace siete años el avión y donde un monumento con la inscripción “En algún lugar… siempre en nuestros corazones”, guarda el recuerdo de las vidas perdidas.

Allí, mantuvieron un emotivo minuto de silencio que terminó con un aplauso, justo antes de que el capellán del aeropuerto cerrase los actos de homenaje con el rezo de otra corta oración. Siete años después, en los corazones de los familiares quedan las palabras de Vera: “Hasta que no haya justicia, no se cerrarán jamás las heridas”.