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Julián López: “Llevar el cine a la gente es un acto muy humano y precioso”

Foto ACADEMIA DEL CINE
Foto ACADEMIA DEL CINE

Damián Cruz Latorre Santa Cruz de Tenerife

El aclamado Julián López, responsable de hacer reír de forma descontrolada en múltiples ocasiones, aparecerá hoy por Guía de Isora con motivo del Ciclo Gas Natural Fenosa de Cine Itinerante, una iniciativa cultural que tiene como objetivo la difusión de la cinematografía española en diferentes poblaciones en las que no existen salas comerciales. López, que es uno de los protagonistas de Perdiendo el Norte (la película que se mostrará en Guía de Isora), estará presente durante su proyección.

-Julián, ¿qué le parece la iniciativa cultural del Ciclo de Cine Itinerante? ¿Qué valoración le merece?

“Pues creo que es una iniciativa maravillosa e incluso necesaria, diría yo, porque cuando se hace cine de lo que se trata es de llevarlo hacia todo el público posible. Vivimos en una época en la que todo cambia muchísimo y muy rápido, y, por desgracia, no todas las películas llegan a todos los sitios. El hecho de que la Academia (de las Artes y las Ciencias Cinematográficas de España) junto a los de Gas Natural Fenosa tengan esta iniciativa, y pueda llevarlas, además, con algún miembro de la película, me parece muy bonito. Me hace mucha ilusión el poder asistir y presentarla en las comunidades”.

-¿Había participado ya con anterioridad?

“No, es la primera vez. Ya sabía de ella, puesto que alguna vez me tantearon, pero no pude tomar parte en ese entonces por las fechas.”

-¿Cree que algo así debería llevarse a cabo a lo largo de todo el año en todas las comunidades posibles?

“Sí, la verdad es que si se trasladase también al resto del año no estaría nada mal; mejoraría aún más. No obstante, lo de que sea en verano tiene su atractivo; las proyecciones suelen ser al aire libre, y tienen un sabor especial. De hecho, yo, cuando veraneaba de niño, asistía al cine y ese sentimiento le daba al evento un toque único y bonito”.

-¿Añadiría algo al Ciclo de Cine Itinerante? ¿Modificaría algo? Por ejemplo, ofertar dos películas en lugar de una, introducir también cine europeo… ¿o piensa que está bien tal y como se encuentra ahora mismo?

“Bueno, ahora está muy bien, aunque tampoco puedo decir que me encuentre familiarizado del todo con él. La experiencia la viviré hoy, y a lo mejor después ya podré juzgarla de forma acorde. El hecho de que sean españolas ya es suficiente, creo yo, pero en todo caso, si hubiesen también películas europeas, estaría bien que fueran en versión original, subtituladas, para motivar la forma en la que creo que debe verse el cine. La presentación que me corresponde hacer será antes de la película, y yo prefiero siempre acudir después, para ver las impresiones y responder a las preguntas. Lo prefiero así, porque la gente curiosea sobre lo que acaba de ver y muestra su interés”.

-¿Está entusiasmado ahora que participa en este proyecto de divulgación cultural y cinematográfica?

“Si, muchísimo. Es un placer, sobre todo el concepto de poder viajar con el cine. Haces una película y asistes a su proyección y presentación en festivales, o en otras ciudades. Tienes tu pequeño producto -no solo tuyo personal, sino del equipo que lo ha hecho posible – y vas en representación para llevárselo a la gente. Puedo decir que es un acto muy humano y precioso”.

-¿Había estado antes por la isla de Tenerife o por la comunidad autónoma de Canarias?

“Sí, estuve. Tenemos una gira mi compañero Raúl Cimas y yo, que pasa tanto por la isla de Gran Canaria como por la de Tenerife. He de decir que tienen mucho encanto; se está muy bien, la gente es muy amable y el público es muy cercano y directo. Y eso se agradece mucho. Para mí es un gustazo”.

-¿Qué opinión le merece Perdiendo el Norte?

“Muchas veces es difícil valorar una película en la que tú estás dentro. Se ve de otra manera. Hay cosas más subjetivas que casi siempre te hacen verla de forma más positiva. Para mí, una experiencia maravillosa. Luego, la peli ha funcionado muy bien en taquilla. Además, la comedia siempre es necesaria, en especial de estas características, que deja marcado ese guiño, esa crítica social. La película narra experiencias que vive la gente estando fuera. Los protagonistas se marchan a Berlín y tienen que prosperar allí como individuos. Opino que es una comedia divertidísima, con un plantel amplio e interesante”.

-Quizás sea una pregunta arriesgada, pero… excluyendo la suya propia, de las películas que se ofrecen en esta programación de verano del
Ciclo de Cine Itinerante, ¿cuál es su favorita?

“Como respuesta trampa, diría Torrente 5, porque también aparezco yo en esa producción. Pero trampas aparte, me quedo con La Isla Mínima. Aparte de que es una película fantástica, me llevo muchísimo con Raúl Arévalo, y he trabajado con Javier Gutiérrez y con el director, con los que tengo una relación cordial. Eso también suma”.

-Terminó ya de trabajar en El Tiempo de los Monstruos. ¿Qué valoración tiene al respecto?

“Una experiencia buenísima que me permitió mostrar una cara distinta a la que yo vengo haciendo en mi trayectoria. El plantel es fabuloso, y el director y guionista trabajó con una historia bastante peculiar, a la par que especial y personal. Considero que se trata de una película muy atractiva”.

-Sobre sus planes de futuro, ¿qué tiene pensado hacer ahora?

“Retomaré la gira con Raúl, en septiembre. No sabemos si será la última, y a partir de ahí persigamos una nueva idea. Aún no hay nada claro. Por otro lado, hay planes de cine que se encuentran ahora mismo en su fase de concepción, y, aunque no puedo decir más al respecto, estos planes llegarán”.