la laguna

Se estudiará eliminar vías de doble sentido para lograr aparcamientos

El Ayuntamiento de La Laguna estudiará la posibilidad de eliminar el doble sentido en algunas vías, como manera de ganar plazas de aparcamiento. “En estas vías la siniestralidad aumenta un 50%, poniéndolas de sentido único bajamos la siniestralidad y, además, conseguimos más aparcamientos y mejoramos la movilidad”, afirmó el nuevo concejal lagunero de Seguridad Ciudadana y Movilidad, Jonathan Domínguez, en una reciente entrevista a DIARIO DE AVISOS.

Esta es una de las acciones que se contemplan en el plan de movilidad para el municipio, aprobado este año, donde se regulan todas las medidas en esta materia. Sin embargo, este plan no podrá ponerse en marcha hasta que se apruebe de forma definitiva el Plan General de Ordenación (PGO), aunque antes “podemos, junto con los técnicos municipales, eliminar algunas calles de doble sentido y buscar rutas alternativas que generen movilidad y ganar aparcamientos en determinados barrios” donde haya quejas vecinales al respecto. Ya el concejal de Obras e Infraestructuras, Agustín Hernández, dijo también recientemente que desde su área se trabajaría en solucionar la falta de aparcamientos, no solo en el centro de la ciudad, sino en otros muchos puntos de todo el municipio.

En cuanto a la peatonalización del centro histórico de la ciudad, Jonathan Domínguez afirmó que, “por el bien de la ciudad”, hay que culminar el Plan Especial de Protección del Conjunto Histórico de La Laguna (PEP), “lo que pasa es que para eso hacen falta muchos millones de euros”, apuntó. En concreto, entre 5 y 7 millones para “terminar todas las peatonalizaciones inicialmente previstas en el PEP”.

“Hay que cerrar toda la parte histórica, quedan unas cuantas calles todavía, sobre todo transversales, más la remodelación de la plaza del Adelantado -explicó-, que también está dentro del PEP, y la peatonalización de las calles de la plaza en torno al juzgado”. Ante la dimensión del trabajo que aún queda por realizar, el edil de Movilidad afirmó que tiene “serias dudas” de que se pueda acometer en este mandato, “porque las dificultades económicas son las que son”. “A no ser que sea a través del Gobierno de Canarias o del Cabildo, o que se puedan acceder a subvenciones de otras administraciones -apuntó-, porque con fondos municipales lo se podrá hacer es la peatonalización de dos o tres calles transversales cortas, a lo mejor, pero esa parte la tiene que priorizar ahora Obras”, indicó.

Acceso motor

Respecto al acceso motor a la zona peatonalizada del casco, Domínguez afirmó que hay un “problema tremendo” en cuanto al acceso de vehículos y que es algo que hay que trabajar “con comerciantes y vecinos”. “Yo estuve en Obras y el costo para el Ayuntamiento de las áreas peatonales, con el hundimiento de aceras y demás, es espectacular -explicó-. Por ejemplo, reparar la calle Tabares de Cala, que es la que está en peores condiciones en estos momentos, puede costar en torno a 100.000 euros, porque el pavimento de las calles peatonales ha sido diseñado para un volumen determinado de tráfico y peso y no es un adoquín barato, sino que se ha puesto material noble en el suelo”.
El concejal añadió que también habría que “mejorar la regulación de las bicicletas”. “No soy partidario de prohibir su uso en zonas peatonales -matizó-, pero sí de que se regulen, porque no puede ser que vayan a alta velocidad” por una zona llena de peatones.

“Los trabajos en la TF-5 no son la solución”

El concejal lagunero de Seguridad Ciudadana y Movilidad, Jonathan Domínguez, afirmó que los trabajos que se están realizando en estos momentos de reordenación de los accesos en la TF-5, para reducir las retenciones, “no es la solución definitiva” al problema. En este sentido, explicó que, a su juicio, “la solución para mejorar el tráfico pasa por el proyecto de bifurcación de la propia TF-5, es decir, su traslado por detrás del aeropuerto de Los Rodeos, que es lo que permitiría que la actual autopista se convierta al final en vía urbana de la propia ciudad de La Laguna, que no esté partida en dos y que el tráfico del Norte fluya de manera directa tanto hacia Santa Cruz, por esa nueva vía, como hacia el Sur, sino a través de la Vía Exterior, que es tan discutida, por la TF-2, que iría unida a esa bifurcación”.
“Es es la solución definitiva -enfatizó-, pero es la más cara y la más polémica, pero tenemos que ser serios y hacer planteamientos racionales sobre el sistema viario de la Isla. No podemos colapsarla, hay que mejorar las vías existentes y potenciar determinadas variantes y carreteras que sí son necesarias”.

En esta línea, Jonathan Domínguez sostuvo que es necesario culminar el anillo insular y, “desde mi punto de vista personal, creo que la Vía Exterior es necesaria y que lo que hacer es hacer un proyecto lo más consensuado posible y con las menores afecciones posibles”. “El trazado es discutible y no digo que sea el mejor -apuntó-, pero hay que buscar una solución responsable y seria y dejarnos de demagogia política, respetando el suelo rústico al máximo”.