Un vuelo desde Glasgow – Tenerife tuvo que aterrizar en Portugal para que 14 pasajeros se bajaran del avión después de tener un comportamiento inadecuado con la tripulación de cabina. Las autoridades policiales investigan ahora los hechos.

La aerolínea británica Jet2 tomó la decisión de prohibir de por vida la entrada a sus aviones a los 14 pasajeros involucrados. El piloto, tras ser avisado por la tripulación de que había un grupo de personas que se estaba comportando de forma ruda y soez, tomó de inmediato la decisión de realizar un aterrizaje de emergencia en la ciudad de Faro, en el Algarve, según recoge el tabloide británico Daily Mail.

El vuelo tuvo que permanecer en territorio portugués durante tres horas, a la espera de tener permiso de nuevo para volar hacia Tenerife.