superconfidencial

Hacía tanto tiempo

1.Hacía mucho tiempo que no la armaba en las redes sociales, como ocurrió el otro día con un inocente escrito sobre ciclistas, escrito en clave de humor. Los energúmenos que se metieron conmigo, incluido algún profesor universitario, demostraron desconocer el sentido del humor y tener muy mala educación pues recurrieron a lo soez para rebatir al chascarrillo. Nadie puede con la ironía, que es un ejercicio de la inteligencia. Este país va tan mal por culpa de los ciclistas airados y de otros intransigentes. Pero, en fin, ahora voy con los del footing que corren por las sendas del colesterol con el aliento apretado y cuanto más sudados, mejor. Es que a los médicos les ha dado por recomendar el ejercicio y mucha gente se lo toma demasiado en serio. Y a veces es peor el remedio que la enfermedad. Caen fulminados por el esfuerzo. Yo recuerdo ver a Juan Alberto Martín, el que fuera vicepresidente del Gobierno con Saavedra, correr -bueno, ir- en bici, enfundado en un plástico para sudar más. No bajó ni un kilo y sufrió muchísimo. ¿Vale la pena eso? Al final se paga porque a nadie se le ocurre enfundarse en un plástico para sudar. Eso tiene que ser malo.

2. A mí no me parece nada estética la visión de esas viejas de la edad mía caminando con unos ridículos pantalones pescador por las veredas tropicales trazadas por los ayuntamientos para aliviar la tensión de los ciudadanos. Las verijas sudadas y el sebo de rendija alterado, camina el frente de juventudes en su versión más carrucha arrastrando los tenis y buscando la salud que no brinda la naturaleza contaminada por el humo. No sirve. Es mejor un paseo por Las Cañadas y respirar el aire puro que esa carrerita urbana y ridícula por las sendas del colesterol.

3. A mí me queda poca vida -me moriré a finales del año que viene-, pero no se me ocurre, para intentar alargarla, hacer carreritas nocturnas con los cascos puestos, oyendo la COPE, y con un reloj en la muñeca que contabiliza los pasos. Para nada. Lo mío es verlos y reírme y espero que no hagan como los ciclistas y se confabulen para insultarme en las redes, ahora que estoy de moda. No saben el favor que me hacen.