No es propaganda, aunque lo parezca; es el reconocimiento público a una empresa que tiene perfectamente asumido que el cliente merece una especial atención y respeto, un presupuesto real y objetivo, y un trabajo de alta calidad y en el tiempo apalabrado. Porque señores, éste sector de la automoción, sobre todo al hablar de talleres de chapa y pintura, mecánica o electricidad, es el rey de la piratería y economía sumergida, aunque insisto, encuentres la excepción que establece la regla, caso de Integral del Automóvil.

Contaré mi experiencia reciente. Resulta que al final de las vacaciones había decidido someter mi coche a una reparación integral de chapa y pintura, lo necesitaba cómo sí de un herido de guerra se tratara; salvo en el techo y en la tapa del capó delantero, en el resto habían abundantes señales de roces y magulladuras, terminando en un surco de dos dedos de fondo por cincuenta de largo en la puerta del maletero. Por cierto, ni un solo golpe bajo los efectos del vino tinto, aclaración obligatoria para los amigos perravinícolas. Total, que fueron cuatro talleres a los que visité, cuyos nombres mantendré en el anonimato, salvo el de Integral del Automóvil. El primero hace trabajos para una importante compañía de seguros, y nada más escuchar el peritaje, entre 2.500 y 3.000 euros, arranqué el coche y no dejé ni huellas. Un segundo, por El Sobradillo, quedó en llamarme por teléfono, y todavía estoy esperando la llamada, a pesar de reiterar mi deseo del presupuesto. Y un tercero, en Barranco Grande, empezó a sumar los daños, y finalmente me pidió 1.500 euros, y quince días de trabajo.

Finalmente, y a través de Internet, localicé el taller de Integral del Automóvil. Resaltar la exquisita atención personalizada y con todo tipo de detalles. Un presupuesto de 861,35 euros, incluido el IGIC, y acabado en cinco días, de lunes a viernes. Integral del Automóvil, situada en la calle Lirio, en El Chorrillo, merece éste reconocimiento público. ¡Enhorabuena!