POLIDEPORTIVO

Risco se gana el sueldo en Bangkok

Sittichai y Risco, tras el pesaje celebrado en Bangkok. / DA
Sittichai y Risco, tras el pesaje celebrado en Bangkok. / DA

Jonay Risco demostró ayer en Bangkok que está entre los mejores kickboxers del momento a nivel mundial dentro del peso medio. El fajador tinerfeño dio la cara y realizó un sensacional combate frente al tailandés Sittichai Sitsoongpenong y acabó cediendo por una justada decisión de los jueces.
Sittichai, el mejor libra por libra de la actualidad, no encontró facilidades en el tinerfeño. Al contrario, Risco respondió con fuego a cada ataque que le lanzó su rival que estuvo más entero físicamente que el de San Miguel, que acabó acusando el cansancio de las 30 horas de desplazamiento y el desgaste de las pocas horas de descanso dada su condición de visitante.

“Me faltó un diez o un 20 por ciento más para ganarle, el combate ha sido de tú a tú, pero, honestamente, me gana”, confesaba un Risco que pese a la derrota estaba “satisfecho” con el papel desempañado ya que en la previa había avisado de que no se iba a conformar con hacer una pelea digna, sino que iba a ganar.
“En igualdad de condiciones le puedo ganar”, aseguraba el de San Miguel, que reconocía que “sin las 30 horas de vuelos, sin tanto cambio horario ni un par de detalles creo que puedo dar un diez o 20 por ciento más y con ese tanto por ciento hubiera ganado”.

“No hay excusas sino seguir trabajando más duro”, aseguraba un Risco que quería despedirse de cualquier tipo de duda. “Creo que he demostrado que lo de Souwer no fue suerte y que estoy a la altura”, resaltaba Risco sobre un combate frente a un hombre que ha noqueado a gente como Murthell Groenhart, ganador del K1 Max, o Davit Kiria, campeón mundial del Glory, además de haber llevado al suelo al mismísimo Andy Souwer.

“Me faltó un poco de chispa que creo que si no es por el viaje tan largo y de tanta diferencia horaria hubiéramos ganado”, confesaba el gran fajador de San Miguel.
Mientras, su entrenador, Moisés Ruibal, admitía que había sido “un combate muy igualado” y que desde su punto de vista no era descabellado pensar “en haber dado un extra round”, aunque el rendimiento ofrecido por Risco ante un rival de dimensiones gigantescas deportivamente hablando dejó al preparador tinerfeño-gallego “muy contento y muy satisfecho”.