La Guardia Civil del Puesto de Granadilla de Abona (Tenerife), en concreto agentes adscritos al área de investigación, practicaron en días pasados dos nuevos arrestos en relación con el robo acaecido en la vivienda del conocido como kamikaze de la TF-1. Precisamente, el ladrón -detenido anteriormente- aprovechó que esta persona había fallecido en el accidente que había provocado al conducir en dirección contraria por dicha vía (y que igualmente costó la vida a otro conductor) y que vivía sólo.

Ahora los arrestados son un hombre de 45 años, vecino del Porís de Abona, y otro de 35, de San Isidro, como presuntos autores de un delito contra el patrimonio por receptación.

Las detenciones fueron llevadas a cabo el día 10 y 14 de septiembre, y el botín consistió diverso material de pesca (cuatro trajes de neopreno, cinco cañas de pesca de barco, un GPS de barco, una sonda de barco, cuatro carretes eléctricos), además de un ordenador portátil, tres televisores y diversos electrodomésticos de cocina.

Una vez iniciadas las investigaciones, un vecino manifestó que una persona conocida le había ofrecido la venta de diverso material de pesca y tras ponerse en contacto con el conocido del testigo, muestra una fotografía que le había sido enviada por un vecino de San Isidro de 37 años (luego detenido como supuesto autor del robo) en la que se puede observar diverso material de pesca situado en el interior de un garaje. Tras localizar a los receptadores se recuperó casi todo el botín.