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El Consistorio niega que el vertido de San Andrés afecte a la playa

Parte de Las Teresitas se cerró en septiembre por contaminación. | M. P.
Parte de Las Teresitas se cerró en septiembre por contaminación. | M. P.

El edil de Servicios Públicos, Dámaso Arteaga, defendió en la Comisión de Control que el vertido de aguas residuales que Emmasa realiza directamente al mar procedentes del pueblo pesquero de San Andrés no supone ningún riesgo para la salud ni afecta en modo alguno a la calidad del agua de baño de la playa de Las Teresitas. Arteaga defendió, en respuesta a Sí se puede, que ya se está tramitando la concesión administrativa con la Autoridad Portuaria para que Emmasa regule la conducción del desagüe a través del suelo del puerto.

El edil de Servicios Públicos además defendió que la descarga de las aguas residuales se efectúa a más de 1.200 metros de la playa de Las Teresitas y, dado el bajo caudal, en nada afecta a la calidad del agua de baño. “Se trata de un vertido a través de tres difusores a 27 metros de profundidad que si sumamos la distancia hace muy improbable que afecte a la zona de baño”, detalló Arteaga, que además añadió que, en todo caso, las aguas tienen un pretratamiento antes de ser vertidas y que los análisis se mantienen dentro de los parámetros marcados por la Unión Europea.

Pedro Fernández Arcila (SSP) insistió en que se están vertiendo las aguas residuales de 10.000 vecinos directamente al mar y sin tratamiento previo, recordando que según los datos del Gobierno de Canarias se trata de un vertido calificado como “muy grave”.

Arteaga negó este dato alegando que está desfasado al pertenecer al censo realizado en 2007. En contraposición avanzó que el Ayuntamiento ha establecido un programa de control y vigilancia de los vertidos que le permite hacer un seguimiento de la situación de los distintos vertidos que existen en la costa. Es ese programa el que les ha permitido llegar a la conclusión del bajo riesgo en este caso.

CONTAMINACIÓN
Pese a los datos aportados por Arteaga, el propio Consistorio, en diciembre del año pasado, en el Estudio del potencial de las playas del municipio, recogía que los vertidos en esta zona del litoral eran de carácter “muy grave” en el caso de la conducción submarina del desagüe de San Andrés.