cho marcial

Cuando las barbas de tu vecino…

El veredicto de la jueza Beatriz Méndez, explicitado en 69 folios, en el llamado caso Varadero, que ha determinado la inhabilitación por siete años de dos cargos políticos y una secretaria municipal, ha supuesto, o debe suponer para ser más exactos, un auténtico aviso a navegantes en la marejada/marejadilla por la que surcan las distintas administraciones que nos gobiernan.

Aquello de que cuando las barbas de tu vecino veas cortar pon las tuyas a remojar podría significarse como el refrán más adecuado para la situación que se advierte en muchos consistorios de nuestra tierra, sabedores sus moradores -no solo los políticos de paso, sino también los funcionarios- que la vigilancia por la correcta disponibilidad del dinero público y de la correcta aplicación de las leyes que rigen nuestro ordenamiento jurídico no pueden ser interpretables o pueden saltarse leyes de rango superior, como Macario Benítez, Ana Lupe Mora y María Anita Alonso se las saltaron para beneficiar desde el Ayuntamiento de El Rosario la construcción de 1.000 viviendas en un paraje ya protegido por el Plan Insular de Ordenación del Territorio (PIOT).

Algunos han calificado la sentencia de suave o leve, quizás porque al que fuera alcalde de El Rosario durante 32 años, Macario Benítez, esa inhabilitación, ya jubilado, le reporta bien poco, quizás lo único que lamentará será no poder dar nombre a una calle de un municipio que gobernó durante tanto tiempo que al final creía que era su finca particular. Ahí, en la permanencia en el cargo, podríamos encontrar el principal factor para entender los comportamientos de algunos de nuestros alcaldes, en donde Macario Benítez, por desgracia, no es ninguna rara avis.

Pero no se trata de una condena leve, por cuanto hablamos de prevaricación administrativa en una urbanización que no llegó a construirse y porque no hubo cohecho ni malversación de fondos. Y no es leve porque cierra la carrera política de Ana Lupe Mora, que aspiraba a la Alcaldía, y porque deja sin trabajo en ninguna administración de toda España a la secretaria Anita Alonso.