Las familias de Santa Cruz de Tenerife y La Laguna se sentirán afortunadas a partir del próximo día 1 de enero de 2016. Así lo valoran los alumnos de 1º de Bachillerato del Colegio Virgen del Mar, dentro del ejercicio mensual que nos hemos propuesto para realizar una columna de opinión dominical y acercarse a temas del día a día en torno a los valores. Mi columna les sirve de espacio abierto.
Estas chicas y chicos nos dicen: “60 ayuntamientos del Archipiélago canario se van a ver afectados por la entrada en vigor, a partir del 1 de enero del próximo años 2016, de un nuevo capítulo de la Ley de Racionalización estatal que obliga a los municipios de menos de 20.000 habitantes a devolver a los gobiernos autonómicos las competencias en servicios sociales.
De los 31 municipios tinerfeños,19 son los que perderán las competencias: Arafo, Arico, Buenavista, Fasnia, Garachico, La Guancha, Güímar, La Matanza, El Rosario, San Juan de la Rambla, San Miguel, Santa Úrsula, Santiago del Teide, El Sauzal, Los Silos, El Tanque, Tegueste, La Victoria y Vilaflor, según recogían distintos medios estos días pasados”.
Ellos escriben y yo sirvo realmente de transmisor: “Si podemos denominar de alguna manera esta decisión, la podemos considerar como una injusticia social. Las personas y familias necesitadas de estos municipios de menos de 20.000 habitantes parece que son de menos importancia que los de mayor número de población.
Nos da la impresión de que se quiere recortar de lo más necesario, es decir, a aquellos que más lo necesitan. Igual se vende como un ahorro administrativo, y puede que lo sea, ahorrar no es malo, pero quizás hay que ahorrar de otras áreas y de otras administraciones, pero no de los Servicios Sociales municipales, y menos de los más cercanos a los que más lo necesitan.
Se imaginan ahora ustedes a una familia del sur de la isla de Tenerife, del municipio de Arico, por citar un ejemplo, dirigiéndose a las oficinas del Gobierno del Canarias o del Cabildo Insular, en la capital en Santa Cruz, para que se les atienda un problema de compra familiar, para poder comer, o de un recibo de la luz que no puedan pagar.
Los ayuntamientos dan una solución diaria a muchas familias y personas sin recursos. Los Ayuntamientos son su solución cercana. Así poco se les ayuda”. Muy cierto, se da la espalda, como nos dicen estos chicos.