En la Carrera

Mariano Gambín

Para mí la Noche en Blanco de este sábado en La Laguna comenzó el viernes, hacia el mediodía, durante una charla-coloquio que ofreció nuestro novelista Mariano Gambín para los alumnos de Bachillerato del colegio Virgen del Mar, y algunos compañeros profesores que nos deleitamos con un mediodía, casi lagunero, de cultura y suspense. Gambín, como si estuviera en el escritorio de su casa, delante de su ordenador, ante el curioso teclado -el primero que tiene la suerte de leer los entresijos de las innumerables curiosidades de sus novelas-, así se dirigió a unos alumnos que han disfrutado este trimestre con la lectura de El Círculo Platónico. Miradas entregadas, rostros de interés, sonrisas ante las muchas anécdotas, y en medio La Laguna, Tenerife, por supuesto, un secuestro, una crisis internacional, un enigma, y en este caso la solución la teníamos, alumnos, profesores, y hasta el director del colegio Virgen del Mar, don Manuel Chinea, allí presente, pues estábamos descubriendo, desde los labios de su autor, todas, por lo menos la mayoría, de las incógnitas de Ira Dei, una trilogía lagunera que nos ha atraído, de verdad. Para los que ya habíamos leído más de una vez la obra, y para muchos de los alumnos que se enfrentaban por primera vez a la buena literariedad de Mariano Gambín, nos parecía encontrarnos paseando por las calles de La Carrera, Herradores, San Agustín, buscando a Marta, Ariosto, Sandra, o al propio Nuncio, incluso a éste para liberarlo del secuestro en el que se encuentra dentro de las páginas de El Círculo Platónico. Digo más, para los que contamos con la suerte de haber publicado algún libro, y además con la gran fortuna de poder ejercer la docencia y convivir con el periodismo, ha sido toda una clase magistral el poder asistir a una rueda de prensa donde los protagonistas, los actores son los alumnos. Las chicas y chicos de Bachillerato del colegio Virgen del Mar celebraron una rueda de prensa que realizaron al propio Mariano Gambín, quien respondió a las preguntas de los alumnos, permitiéndoles que fuesen periodistas por un día. Los profesores de siempre, los grandes maestros, no paran de repetirnos que la mejor manera de enseñar es dejando que el alumno sea el protagonista en el aula en todo momento. Esta jornada con Gambín ha sido otro gran ejemplo de que esto es cierto. Gracias, don Mariano.