El Jardín de Aclimatación de La Orotava, más conocido como Jardín Botánico, en el Puerto de la Cruz, contará en 2016 con una partida de 895.617 euros en los Presupuesto Generales de la Comunidad Autónoma de Canarias. Según se refleja en los estados consolidados de las cuentas regionales, este dinero se consigna como destinado a revisión de precios, ajardinamiento y nuevas instalaciones. Este dinero viene a dar el impulso final a unas obras de acondicionamiento y ampliación de este espacio que se alargan en el tiempo. En septiembre de este año se anunciaba un nuevo retraso para inaugurar el centro de visitantes, obra que se incluye dentro de la tercera fase de la ampliación del recinto, debido a que aún no se ha recibido la obra por parte del Instituto Canario de Investigaciones Agrarias (ICIA), administración de la que depende el Jardín. Con los casi 900.000 euros que destina el Gobierno de Canarias, la última y cuarta fase del remozado del Jardín Botánico, consistente en el ajardinamiento del centro de visitantes, un invernadero de plantas neotropicales y la recreación de una selva amazónica a escala, que ocupará unos 26.000 metros cuadrados más, entre otros proyectos, parece que puede comenzar a tomar forma de cara a los próximos años.

En cuanto a la apertura del centro de visitantes del Jardín Botánico, se prevé que tenga lugar durante el primer trimestre de 2016, según confirmaba en septiembre a este periódico el director del recinto, Alfredo Reyes Betancort. Entonces explicó que el retraso obedecía a que había de valorarse la recepción de esta obra por parte del Ejecutivo, regional porque a priori tenía defectos constructivos que hay que evaluar para que sean subsanados por la contrata.

Una vez que se estudie este documento, se decidirá la fecha exacta para recibir la obra. El siguiente paso que hay que acometer es sacar adelante la gestión de los servicios: un restaurante con terraza, una sala de proyecciones, otra de exposiciones, un aula de educación ambiental y una tienda de souvenirs, que se encuentran dentro de los 14.000 metros cuadrados que tiene el nuevo edificio. Pero los plazos para lograrlo se encuentran muy ajustados. Así lo reconocía Alfredo Reyes, quien reconocía que apenas había tiempo para elaborar el pliego de condiciones definitivo y sacar a concurso los distintos servicios. En cuanto a la última fase, el jardín ya se había adelantado, a la espera de la financiación, con la adquisición de nuevas plantas, que aguardan en el vivero del Jardín Botánico.