La playas de Radazul permanecen cerradas al baño, tal y como estipuló Sanidad Pública como medida preventiva, tras la rotura de una tubería de Balten que este miércoles originó una ‘riada’ en la zona baja del municipio de El Rosario.

Tanto operarios del Ayuntamiento como de Balten han estado durante toda la jornada de este jueves realizando trabajos para procurar la vuelta a la normalidad en Radazul Bajo tras la inundación de las calles Magallanes y Juan Sebastián Elcano.

Así, operarios del organismo insular han sustituido la sección de tubería dañada para poder continuar prestando el servicio de traslado de aguas depuradas y tratadas para el riego agrícola, de parques y jardines y campos de golf desde la depuradora de Santa Cruz de Tenerife hasta el municipio de Arona.

Por su parte, operarios municipales, adscritos al área de Limpieza, comenzaron a limpiar la vivienda más afectada por la inundación producida ayer en la calle Magallanes, de Radazul.

Se da la circunstancia de que los trabajadores tuvieron que esperar casi 24 horas hasta que el perito del seguro, que tenía contratado la propietaria de la vivienda, hiciera acto de presencia para levantar acta de los daños y así poder iniciar los trabajos de adecentamiento del lugar.

Además, trabajadores municipales y de la compañía Urbaser realizaron labores de limpieza del paseo de La Nea hasta donde llegó el torrente de agua y barro, dada la pendiente de las calles.

El alcalde de El Rosario, Escolástico Gil, se personó en la zona para realizar un seguimiento a los distintos trabajos de todos los servicios implicados y destacó la rápida actuación por parte de Balten para solventar la rotura causante de los destrozos.