Un servicio preventivo llevado a cabo por la Policía Local de La Laguna para poner coto a la proliferación de pandillas juveniles en la zona de ocio conocida como el Cuadrilátero se ha cerrado en una primera fase con la intervención de los funcionarios en 86 casos de menores de edad a los que se condujo a Jefatura, información facilitada por el Ayuntamiento a este periódico.

Si se tiene en cuenta que esta primera fase se ha llevado a cabo durante una semana, esa media superior a los 12 menores por día da cuenta de lo perentorio del servicio, requerido tanto por usuarios como empresarios de la zona, ya que los chicos se agrupaban y protagonizaban desde peleas hasta incidentes con personas mayores. Si bien se han detectado acciones delictivas, lo más común en estas pandillas es una actitud gamberra que, desde luego, resulta contraproducente para este sector de ocio lagunero, antaño floreciente.

Por lo que respecta a las cifras, reseñar que los policías asignados a esta tarea, un oficial y seis agentes que trabajaron de paisano, se llevó a cabo los días 2, 3, 9, 10, 16, 17 y 23. O, lo que es lo mismo, cuatro viernes y tres sábados de este mes.

Sin duda, el dato más interesante es el desglose de edad de los 86 menores en cuestión: 39 de ellos tienen 17 años, 22 ya han cumplido los 16, hasta 21 sólo suman 21 primaveras y, lo más llamativo, 3 tienen 14 años y el restante apenas 13.

De los 86, un total de 64 fueron recogidos en la Jefatura por sus tutores legales (sean sus padres o madres o no), mientras que los otros 22 fueron trasladados a sus respectivos domicilios.

En cuanto a las actividades que realizaban algunos menores, apuntar un guarismo preocupante: se levantaron hasta 37 actas por posesión de drogas, tres por alteración del orden público y, en uno de los casos, por posesión de un arma. Sólo cuatro de las intervenciones efectuadas se realizaron sobre menores reincidentes.

Entre la información recabada destaca igualmente que hasta 12 de estos jóvenes tienen un expediente abierto en la Fiscalía de Menores (organismo que había dictado la orden de detención contra uno de ellos), y que diez son usuarios de los Servicios Sociales del propio Ayuntamiento de La Laguna.

Además, se da la circunstancia de que uno de los chicos tenía pendiente una reclamación policial por su presunta participación en un delito de daños, mientras que otros dos se encontraban fugados de sus respectivos recursos de protección.

El caso de la pareja
Se intervino igualmente en el caso de una pareja. La ausencia de ella había sido denunciada por sus parientes más cercanos, mientras que a él (al parecer su pareja sentimental) se le reclamaba por un delito contra los derechos y deberes familiares por inducción al abandono del domicilio familiar.

Todo ello originó a su vez la actuación posterior de los funcionarios municipales, ya que como consecuencia del servicio se elaboraron un total de once atestados ante la Fiscalía de Menores y tres cuyo destinatario era algún juzgado, además de diez informes técnicos enviados a la Seguridad Social y ocho más que terminaron en la Dirección General del Menor.

Eso sí. Esta actuación preventiva de la Policía Local lagunera no ha terminado. De momento han intervenido en la calle, pero pronto se ampliará la actuación al interior de los locales.