TRIBUNA

Por ellas

Hoy, 25 de noviembre, es el Día Internacional de la Eliminación de la Violencia contra la Mujer. Es una conmemoración que no debería existir, pero que se hace necesaria ante la oleada de casos de violencia machista dentro y fuera de nuestra isla. Hoy es una jornada para la reflexión y para la acción. Para la reflexión porque nos obliga a pensar en dónde estamos fallando para que, en pleno siglo XXI, haya aún quienes minusvaloren a la mujer y favorezcan esta lacra social que parece no tener fin.

También hoy es un día para la acción, por eso recordamos el Pacto por Ellas que suscribimos antes de las pasadas elecciones como compromiso claro por desarrollar políticas que favorezcan a las mujeres. En el Cabildo de Tenerife somos conscientes de ello. Esta institución ha realizado a lo largo de estos años acciones encaminadas, por un lado, a reforzar políticas de igualdad entre sexos con el fin de prevenir la violencia contra las mujeres y, por otro, a desarrollar una red de recursos y servicios especializados y estables para responder a las necesidades de las mujeres que sufren violencia de género. Estos recursos y servicios están dirigidos al asesoramiento y al seguimiento de terapias de recuperación para que las mujeres, niñas y adolescentes superen las secuelas producidas por las diferentes formas de violencia de género.

Con el objetivo de garantizar la correcta homogeneidad de las actuaciones, la estabilidad de recursos, programas y servicios, la formación de los profesionales, la atención a los diferentes sectores de la población y la calidad de los servicios ofertados a las mujeres, el 28 de noviembre de 2003 se creó la Unidad Orgánica de Violencia de Género, dependiente del IASS. Con la seguridad de que en la actuación frente a la violencia de género como fenómeno social debemos participar y estar implicados todos, se crea la Conferencia Insular como foro permanente, de carácter consultivo y multisectorial, del que surgen las propuestas de actuaciones de prevención y erradicación de la violencia de género en la Isla.

El Cabildo de Tenerife cuenta, además, con recursos de atención en diferentes municipios de la Isla, como es el Dispositivo de Emergencias de Mujeres (Dema) y el correspondiente centro de acogida inmediata (DEMA-CAI), destinado a las mujeres y menores en riesgo inminente. A esto se suman las casas de acogida para alojamiento temporal, así como el desarrollo de programas de apoyo e intervención para su fortalecimiento personal y reintegración social y laboral, así como pisos tutelados para alojamiento de mujeres y menores.

Con el fin de reforzar esta atención, el Cabildo dispone de oficinas distribuidas en diferentes municipios a través del Servicio Insular de Atención a la Mujer (SIAM), así como servicios especializados de atención e intervención con víctimas de violencia de género destinados a la atención, asesoramiento y seguimiento de carácter social, jurídico y psicológico, incluyendo también a los hijos e hijas. Para ello se destina en la Isla un presupuesto anual cofinanciado entre el Cabildo y el Gobierno autónomo, por medio de un convenio de colaboración entre la Corporación insular y el Instituto Canario de la Mujer.
En este marco de compromiso en la lucha contra la violencia de género, y siguiendo las recomendaciones del mencionado Foro Insular, queremos seguir reforzando en 2016 las políticas de igualdad, participar con otras administraciones en la formación y sensibilización de profesionales y población general, reforzar las unidades de atención -al desdoblar dos nuevas unidades y reforzar dos de las ya existentes-, así como la puesta en funcionamiento de otro piso tutelado, y revisar y mantener los protocolos actualmente existentes.

Como eje sobre el que pivotan las políticas de igualdad que promovemos en Tenerife figura el Marco Estratégico Tenerife Violeta, cuyo objetivo es intervenir de manera directa en las desigualdades entre mujeres y hombres. Con él buscamos comprometer a los agentes políticos, sociales y económicos en la aplicación de políticas de igualdad de oportunidades. Este marco, que es también una herramienta de cooperación, nos permite luchar de forma indirecta contra la violencia machista, mediante el fomento de medidas que favorezcan la igualdad entre hombres y mujeres.

Pero esta lucha no se dirime sólo en los escenarios políticos. Cada uno somos responsables en nuestro entorno más cercano de nuestras actitudes hacia la mujer, hacia lo que representa y hacia sus necesidades. Se equivocan quienes subrayan la debilidad de su género y abusan de ello. La mujer, por el contrario, se caracteriza por su fortaleza, una cualidad que la hace aún más digna de admiración. Hago desde estas líneas una invitación a reflexionar sobre ello. Así, entre todos, podemos contribuir a que en un futuro cercano no sea necesaria la conmemoración del Día Internacional de la Eliminación de la Violencia contra la Mujer.

*presidente del cabildo de tenerife