el entrenador personal

Primeros auxilios – Por Antonio García-Peñuela Castro

Una cosa que tenemos que tener en cuenta a la hora de realizar cualquier actividad física es una noción básica de los primeros auxilios. A la hora de apuntarnos en un gimnasio es algo que tendríamos que valorar, pues muchísimos centros no cuentan con el equipamiento necesario (desfribilador, botiquín completo, etc.) y seguidamente el protocolo de bienvenida o nueva alta de usuario del centro. Lo ideal es que antes de cumplimentar el contrato servicio nos exijan realizar un test denominado PAR-Q. Dicho test va a informar al entrenador de patologías y factores de riesgo si existieran, lo que va a permitir estructurar y adaptar el entrenamiento de manera personalizada según nuestras necesidades particulares. De esta manera obtendremos un entrenamiento mucho más seguro, y el entrenador con esta información tendrá una herramienta excelente para la obtención de datos. Si tu entrenamiento lo realizas al aire libre te recomendamos que te documentes acerca de este test y lo realices, recuerda que más vale prevenir que curar. Los primeros auxilios son la ayuda básica y necesaria cuando tiene lugar un accidente o enfermedad hasta la llegada de un profesional. A continuación les facilitamos siete sencillos pasos que debemos seguir:
Mantener la calma: importante para actuar de manera eficiente y rápida.

Seguridad: evaluar la zona del accidente.

Verificar el estado del lesionado: evaluar si está consciente; de no estarlo, si respira, si tiene pulso sanguíneo y presionar la hemorragia si la hubiese.
Signos vitales: si contamos los latidos, pulsaciones y respiraciones en 20 o 30 segundos y los multiplicamos por tres vamos a obtener las respuestas en un minuto. En el caso de los niños corresponde a 20-30 resp/min; en adultos, a 20-16 resp/min, y en mayores, a 16-14 resp/min.

Asfixia: en caso de atragantamiento realizar la maniobra de Heimlich, llamada compresión abdominal.

Respiración de salvamento: si no respira, se debe realizar un insuflación cada 5 segundos 12 veces por minuto. Lo ideal es encontrar un ritmo 1-2-3-1 (en este número la realizamos).
RCP: la reanimación cardiopulmonar es una combinación de respiraciones y compresiones torácicas. Hay que colocar las manos al reborde del esternón, entrelazarlas y presionar fuerte con los codos extendidos. Hay que realizar 30 compresiones cada dos ventilaciones .

Y si tenemos una lesión a nivel muscular o articular, ¿qué debo hacer? En este caso debemos parar inmediatamente el ejercicio que está produciendo la lesión y seguidamente aplicar el método R.I.C.E. Muchos se preguntarán qué son estas siglas tan importantes y conocidas entre profesionales de la salud y del deporte. R de reposo; I de hielo, aplicar durante 15-20 minutos una bolsa de hielo (recordemos el truco de los guisantes y el jabón); C de compresión, una sujeción elástica disminuye la inflamación y favorece la circulación sanguínea; y por último, E de elevación, lo que mejora el flujo de retorno sanguíneo, cuanto más alta, mejor será el drenaje.

Esperamos haberles contado algo nuevo que les pueda servir de ayuda ante los gajes del oficio, mucho ánimo y recuerda que la mejor versión de ti mismo está por llegar.

*director deportivo universidad alfonso x el sabio de madrid
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