Fernández Cara, después de unos años ausente en las salas de arte de Santa Cruz, se presenta en la galería de arte del Hogar con una variada exposición de acuarelas con una temática variada, tantos de paisajes de Granada como de Tenerife. La galería El Hogar está llevando a cabo una serie de exposiciones en la que los pintores realizan allí mismo, en sesiones de mañana o tarde, sus trabajos. Bonita experiencia que comenzó con Julio Padrón hasta llegar a este artista. Fernández Cara es un buen acuarelista formado en la escuela andaluza. Le conocimos hace algunos años en la galería Círculo de Amistad, con una buena colección de sus trabajos, algunos muy especiales dedicados a Granada.
Para este pintor, creo que la luz, primero de Andalucía y luego la de Tenerife, le ha servido de motivo principal en su obra. La composición es factor esencial en los temas y situaciones que Fernández Cara plasma en sus cartones, que tienen siempre un soporte real que se concreta en una localización precisa estudiando pictóricamente la relación entre el factor espacio y tiempo. Pintura de inquietudes resuelta con conocimiento y academicismo que alcanza una personalidad acertada. Todo lo explica con el color que se hermana con lo descriptivo para transmitir una bella sensación de grata placidez.
En la obra de este pintor todo es original, atrayente, complaciente. Su obra es un hacer diario, plasmado por quien conoce muy bien la vida, mirada limpia y experiencia vital. El saber observar le hace buscar en ciertas formas la liberación de la realidad y le permite crear una acuarela que comparte con el espectador. Nuestro Teide, su Valle de Ucanca, la espectacularidad de los macizos de nuestra Isla vistos desde Granadilla o Los Cristianos, los convierte en dominio mágico de luz, de cielos celestes, de ocres y amarillos, de rojizos en los atardeceres sureños, en pinceladas detallistas nos acerca la realidad de sus caseríos alpujarreños o de los pequeños pueblos tinerfeños encajonados entre altas montañas, y nos los acerca ante nuestra vista, ante nuestra observación, con su rica paleta y con la luz perfecta de sus trabajos.
Fernández Cara es un pintor que sabe convertir y otorgar aire universal a sus temas, para él profundamente amados y queridos. El resultado son unos cuadros que invitan a soñar. Su pintura está plena de formas, de fuerza, de explicado cromatismo, en juego limpio de lo que ve y siente, lo que le llega al fondo del alma y le inspira para plasmarlo con personalidad, la que él se ha formado y forjado a través de sus años de estudio y trabajo, de aquí su acuarela atrayente.
En su obra el pincel está siempre atento al detalle, sabe encuadrar, todo respira en sus cuadros maestría y sabiduría con lo que hace.