Partiendo de las matemáticas y relacionándolas con las demás áreas de conocimiento, alumnos y maestros del colegio Agustín Espinosa de Los Realejos construyeron un original belén con las figuras del tangram que les hizo merecedores del primer premio de portales organizado por el Ayuntamiento.

La idea que se plantearon era hacer un nacimiento diferente, con figuras geométricas, material reciclado, y que fuera también una situación de aprendizaje en la que todas las áreas trabajasen con un objetivo común. Teniendo en cuenta esto último, decidieron utilizar el tangram.

Este último es un juego chino muy antiguo llamado Chi Chiao Pan, que significa tabla de la sabiduría. El puzle consta de siete piezas o tans, que salen de cortar un cuadrado en cinco triángulos de diferentes formas, un cuadrado y un paralelogramo. El juego consiste en usar todas las piezas para construir diferentes formas.

La actividad se inició en septiembre. Fue en ese momento cuando la comisión organizadora decidió la situación de aprendizaje titulada El tangram de colores va al portal y cada uno de los profesores tuvo que establecer los objetivos que pretendía alcanzar. La siguiente fase consistió en la construcción de las figuras y la recogida del material reutilizado, que se solicitó a las familias, desde cartones, pasando por tapas de botellas y yogures hasta cáscaras de huevo.

ORGANIZACIÓN DEL TRABAJO
Para alcanzar el producto final, durante todo el trimestre se trabajó la geometría. Se dividieron los personajes por clases y se instauraron algunas las premisas, como por ejemplo, que las figuras se construyeran en cartón; en el caso de que se pintaran, que cada pieza fuera de un solo color, a ser posible primario; y si se decidía no hacerlo, que se emplearan para su decoración materiales reciclados, explica la subdirectora del centro educativo, María Jesús Abreu.

A ello hay que sumarle algunas que se pusieron desde el comienzo, como que las piezas no se despegaran totalmente, un reto importante que implicó que se dividieran, cortaran y dejaran un centímetro entre una y otra, por eso algunas están de pie y colgadas, según detalla Abreu.

La tercera y última fase, en la que estuvieron trabajando “a destajo” hasta el 15 de diciembre, consistió en la ubicación y decoración de las figuras hasta formar el belén que se encuentra expuesto en la primera planta del colegio realejero.

Es la primera vez que ganan el primer premio de belenes que organiza la Concejalía de Cultura del Ayuntamiento de Los Realejos, aunque en dos ocasiones se llevaron un segundo. “Estaba para ganarlo, pero nunca sabes cómo van a ser los que presentan los otros centros participantes”, confiesa la vicedirectora.

HASTA EL FINAL DE CURSO
María Jesús Abreu subraya la importancia de que toda la comunidad educativa se haya involucrado y participado en esta iniciativa, sintiéndola como suya. Prueba de ello es que se planteó la posibilidad de quitar a San José, la Virgen, el Niño y los Reyes Magos, y en su lugar ir variando las figuras para jugar con las escenas y dejar el resto hasta que finalice el curso.

De esta manera, añade, se aprovecharía el escenario en fechas claves y señaladas como el Carnaval o el Día Internacional de la Paz, por citar únicamente dos ejemplos. “Nos da mucha pena quitarlo, porque le dedicamos todo el trimestre”, insiste Abreu. Por último, asegura que las expectativas ya están puestas en el siguiente curso, en el que una vez más trabajarán duro para volver a conseguir el galardón.