El trabajo de las fuerzas y cuerpos de seguridad del Estado para atrapar a los responsables del asesinato de Raimundo Toledo, un empresario del sur de la Isla, ya presenta avances ciertamente significativos.

Si el pasado viernes fueron efectivos de la Guardia Civil los que arrestaron a una mujer por su presunta implicación con el crimen, tal y como adelantó La Opinión, ayer se dictó orden de búsqueda para localizar a un varón del entorno de la víctima, según detallaron fuentes cercanas a la investigación.

Mientras tanto, el Cuerpo Nacional de Policía continúa con sus indagaciones sobre los negocios del fallecido, que ya el pasado sábado condujo al interrogatorio de tres empresarios, lo que se prolongó durante horas. Sea como fuere, los mejores especialistas de ambos cuerpos siguen trabajando con intensidad en un asunto del que se espera pronta resolución.

Una buena señal de cómo marchan tales trabajos llegará cuando la mujer detenida pase a disposición de la autoridad judicial, perteneciente al partido de Granadilla de Abona, y se conozca la decisión del titular del juzgado en cuestión, algo que sucederá hoy o, como muy tarde, mañana.

En cuanto al ahora ausente, de momento solo se le busca para que justifique precisamente esta sorprendente ausencia, aunque hay quien le relaciona con el arresto ya practicado y un vehículo que al parecer sirve de nexo a ambos con el crimen.