PUERTO DE LA CRUZ

La plataforma Maresía critica que se empiece una obra sin terminar otra

Fue la primera toma de contacto entre la plataforma ciudadana Maresía y un alcalde de Puerto de la Cruz. En este caso, Lope Afonso se decidió a dar el paso y recibió a los miembros del colectivo. La reunión, solicitada desde septiembre, tuvo lugar el martes en el Ayuntamiento. La ocasión sirvió para que cuatro integrantes de Maresía le trasladaran al mandatario municipal varias preocupaciones, entre ellas, que se empezara una obra, como la de la calle de Quintana, sin solventar las deficiencias que había en el paseo y la playa de San Telmo, aunque según el alcalde, “se pueden hacer al mismo tiempo”. El objetivo de la plataforma es participar en todos los aspectos relacionados con el patrimonio, tanto cultural como natural, y por eso le solicitaron al alcalde que la tuviera en cuenta.

Según trasladaron sus miembros a este periódico, Afonso reconoció que existían algunos problemas y les comentó que “se iban a solucionar en una segunda fase”. El inconveniente más importante es la inversión que supone. En este sentido, sostuvo que es necesario un presupuesto añadido para solventar, por ejemplo, los problemas surgidos con el pavimento.

Otro es el acceso a la playa para personas con dificultad, ya que al no haber rampa, “pueden ver el mar desde arriba pero no pueden bajar como antes”, pese a que la plataforma lo advirtió, igual que la necesidad de construir baños y duchas específicas destinadas a estas personas. En general, apuntan desde Maresía, hay que solucionar los desniveles en todo el paseo, que al no tener barandillas, como antaño, son un gran problema, que se suma al “sorteo de obstáculos” que suponen los escaparates por fuera de los establecimientos.
Maresía sostiene que todos estos defectos se deben a que no se hicieron los correspondientes sondeos y catas en su momento, y pese a que el Cabildo de Tenerife se comprometió a subsanarlos, siguen estando presentes.

Lope Afonso les afirmó que desde el Ayuntamiento se solventarían todas estas deficiencias, pero para ello la Corporación insular debía asumir la inversión.

Otro proyecto controvertido es la mejora de la calle de Quintana, dado que “los bancos y las plantas van a desaparecer, quedará una gran pendiente en la parte más cercana a la plaza del Charco y todo será de gris, con el mismo pavimento que San Telmo”, apuntan en la plataforma. Según les dijo el alcalde, “el color es normativa de Patrimonio”.

Colaboración

Maresía le dejó claro que su intención es colaborar para que no se pierda el patrimonio que todavía permanece en Puerto de la Cruz y ambas partes acordaron la formación de una comisión o un foro, en la que participen asociaciones, plataformas y entidades públicas y privadas para difundir todos aquellos aspectos que realcen y conserven el legado de la ciudad “que cada día se deteriora más”.