JUICIO A LA CAMORRA

El jefe de clan Polverino asegura que ni siquiera sabe dónde está Tenerife

Giuseppe Polverino, ayer en videoconferencia. / EP
Giuseppe Polverino, ayer en videoconferencia. / EP

El considerado capo de la Camorra napolitana, Giuseppe Polverino, conocido como O Barone aseguró ayer en la Audiencia Nacional durante la segunda sesión del juicio en el que se le piden 10 años y cuatro meses de cárcel que ni siquiera sabe dónde está ubicado Tenerife, a pesar de que se le acusa, junto a otros 20 imputados, de blanquear capitales con la construcción del Marina Palace en Adeje.

A buen seguro que su lugarteniente Raffaele Spasiano, podía haberle informado. Aunque negó ser quien sustituyó finalmente al fallecido Giuseppe Felaco al frente del complejo sureño, Spasiano reconoció que pasaba en Tenerife las vacaciones de verano junto a su mujer, y que adquirió un apartamento en el complejo porque le encantaba la zona. Ha agregado que lo compró a través de un préstamo hipotecario.

Tanto el capo como su lugarteniente declararon ayer mediante videoconferencia, habida cuenta de que ambos se encuentran presos en el país transalpino.

“Vine a España para llevar una vida normal”, indicó a través de videoconferencia desde la prisión de alta seguridad en Italia donde cumple 60 años de cárcel por asociación mafiosa y otros delitos. Polverino, cuyo apellido dio nombre a uno de los principales clanes mafiosos del sur de Italia, reconoció en respuesta a las preguntas formuladas por la Fiscalía Anticorrupción, que está pagando en prisión los errores cometidos en el pasado. Sin embargo, negó las acusaciones que se le formulan en España, donde presuntamente montó una compleja estructura destinada a lavar el dinero de la droga (tráfico de hachís) mediante inversiones inmobiliarias.

Aunque el presidente de la Sala, Félix Alfonso Guevara, declaró impertinente la pregunta, mención especial merece que el fiscal inquiriese a Polverino si había ordenado el asesinato de Luigi Felaco, nieto de los hermanos Nuvoletta y en principio heredero natural del negocio tinerfeño tras la muerte de su padre, Giuseppe Felaco, fallecido por cáncer tras eludir la redada de 2011 en Adeje. Luigi también escapó y fue capturado en Nápoles cuando pretendía volver a Tenerife en su barco. Tras salir de la cárcel alegando que requería diálisis, recibió tres disparos en el rostro frente a una pizzería en Calvizano (Nápoles). Hay que tener en cuenta que la muerte de Luigi dio pleno control a los Polverino.

Por su parte, el considerado cerebro financiero de los Nuvoletta, Pietro Nocera, aseguró que no conoce a Polverino, que se dedicaba a negocios inmobiliarios y que después de ir en 1996 a Tenerife de vacaciones decidió con Giuseppe Felaco construir cuatro edificios en la Isla pero el proyecto se fue al traste cuando este último ingresó en prisión y rompió relaciones con él. Nocera fue arrestado por primera vez en Gran Canaria allá por 2005.

El también acusado Vicenzo Panico ha declarado que fue a Tenerife en 2000 después de que conociera en Nápoles a Giuseppe Felaco, que le dio la oportunidad de trabajar en un complejo inmobiliario que se estaba construyendo en la isla.