los silos

Rocinante será quemado el domingo tras un breve indulto

La escultura de madera del caballo de Don Quijote permanece desde finales de noviembre en la plaza de La Luz, a petición de los vecinos. | DA
La escultura de madera del caballo de Don Quijote permanece desde finales de noviembre en la plaza de La Luz, a petición de los vecinos. | DA

Llegó el momento que nadie quería, pero que todos los vecinos de Los Silos sabían que tenía que llegar. Después de un breve indulto concedido por el Ayuntamiento, Rocinante será quemado el domingo en la trasera del antiguo convento de San Sebastián, una vez que finalice la feria de ganado y artesanía de San Antonio Abad.

Ese era su destino y la condición que puso su autor, el artista italiano Luigi Stinga, debido a que se trata de una obra de arte efímero y, por lo tanto, debe ser destruida.

La escultura del caballo de Don Quijote no ha dejado indiferente a nadie desde el mismo momento en que comenzó a gestarse, a finales de noviembre de 2015, con motivo del Festival Internacional del Cuento del pasado año, dedicado a la figura de Don Quijote de la Mancha.

Fueron los habitantes del municipio quienes solicitaron que estuviera un tiempo más en la plaza de La Luz, donde permanece desde entonces para ser admirado y disfrutado, y se buscara una ocasión especial para poder quemarlo, con el respeto que se merece.

Por eso los responsables del Gobierno municipal y del Festival del Cuento decidieron que fuera el día de San Antonio Abad, patrono de los animales, una celebración importante en Los Silos, dado que fue uno de los primeros municipios en los que apareció la imagen del santo, en 1748, según se recoge en el libro San Antonio Abad y su festividad, del historiador local, Álvaro Hernández Yanes.

Stinga se asombra de la repercusión que ha tenido su obra. Pero insiste en que su destino final sean las llamas, porque lo que importa no es el resultado final sino el proceso de creación.

El escultor participará en el acto. Además, porque su compromiso con el Ayuntamiento durante todo este tiempo ha sido solventar cualquier desperfecto que surja con su obra, dado que esta se encuentra al aire libre, y el sol y la lluvia pueden haberla dañado. Por eso, la escultura se trasladará manualmente desde la plaza hasta la trasera del antiguo convento, en la zona de tierra, donde están los aparcamientos, que ese día será habilitada para la feria de ganado.